Cinco razones para comer guisantes
Los guisantes son las semillas de la planta trepadora Pisum sativum, una legumbre que crece en climas húmedos. Esta planta pertenece a la misma familia que las habas y lentejas. No obstante, su fruto se encuentra dentro de las vainas verdes. Este recubrimiento protege el fruto de daños externos.
Su origen está en Asia Central y Oriente Medio, donde ya se cultivaba en el Neolítico (7.000 a.C.). En Europa, este producto es muy consumido en la dieta mediterránea, aunque inicialmente se consumían en seco. No fue hasta el siglo XVII cuando se comenzó a tomar fresco. Actualmente se utiliza en las cocinas de todo el mundo, especialmente en Francia, China y Rusia. No obstante, un dato curioso es que la mayor parte de su producción se destina a pienso animal y solo una pequeña parte al consumo humano.
Hay múltiples variedades de guisantes dependiendo del color, forma, tamaño y sabor. A continuación te damos cinco razones por las que debes comerlos.
Esta legumbre es una fuente de vitamina B1, un nutriente esencial para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. Además, posee minerales e hidratos de carbono.
Los guisantes pueden degustarse secos o verdes y frescos. En el caso de los secos, sus proteínas e hidratos de carbono son menores, pero contienen menos grasas. Si prefieres consumirlos verdes, estos serán muy dulces y contienen mucha agua.
Los guisantes tienen un alto contenido proteico, aunque depende de si son secos o frescos. En el caso de los secos, su aporte de proteínas es mayor (un 22% de su contenido total). No obstante, tienes que tener en cuenta que tienen mucha lisina, un aminoácido esencial para el mantenimiento de los huesos, pero poca metionina, un aminoácido responsable de sintetizar la proteína. Por ello, se recomienda consumirlos con cereales para tener una proteína de más calidad.
La fibra es un componente importante de los guisantes, al igual que otras legumbres. Existen dos tipos de fibra: soluble e insoluble. La fibra insoluble regula el tránsito intestinal y la soluble se encarga de rebajar el colesterol y el azúcar presentes en la sangre.
Su contenido en grasa es muy bajo, independientemente de si son frescos o secos. Por ello, se suelen recomendar en dietas para adelgazar o de mantenimiento de peso.
Ficha
Tiempo de preparación GlutenFreeDietmin
Tiempo de preparación 30min
Tiempo de cocción 5min
Porciones 4
Tipo de receta (n/a)
Ingredientes
- 700 g de guisantes
- 700 ml de caldo de ave
- 100 ml nata
- 1 cebolla
- aceite de oliva
- pimienta
- sal
- 32 colas de gamba de tamaño mediano o pequeño
- 1 manojo de menta fresca
- 100 g de alga wakame fresca
Preparación
Pela las gambas y resérvalas
En un cazo, rehoga la cebolla cortada en daditos con el aceite, vierte el caldo y, cuando hierva, añade los guisantes
Déjalo hervir 3 minutos
Tritura la preparación y cuélala
Vuelve a ponerla al fuego y, sin que hierva, añade la nata
Salpimienta
Agrega un poco más de nata y, sin mezclarlo, bate la superficie con un túrmix
Marca las gambas en la sartén con un poco de aceite
Coloca las algas y las gambas recién marcadas en el centro de un plato hondo, sirve la sopa y decórala con unas hojas de menta