Aunque cada vez los usamos menos en la cocina, lo cierto es que los berros son uno de los alimentos más saludables que podemos llevarnos a la boca. No solo por su alto contenido en vitamina C o en calcio (este último superior al de la leche), sino porque contienen más de 15 vitaminas esenciales.
El Nasturtium officinale, como así se denomina en latino, crece en los riachuelos, en las fuentes y en las aguas limpias y frías a la orilla de los rayos, aunque también se puede cultivar. En España no hay demasiada tradición en torno a su cultivo, aunque en Dinamarca, Italia, Bélgica o Inglaterra sí lo hacen.
Los berros se consideran uno de los vegetales más antiguos que consume el ser humano, siendo un alimento especialmente apreciado en las Islas Canarias, donde es tradicional el potaje de berros. Perteneciente a la familia de las crucíferas (la misma que la de la col, el rábano, la coliflor o el nabo), esta verdura no tiene nada que envidiarle a los considerados 'superalimentos'. Te resumimos sus principales virtudes para la salud.
¿Por qué deberías añadir los berros a tu dieta?
Del mismo modo que sucede con otras verduras de su especie, el berro es un alimento con gran densidad nutricional. Es decir, que contiene altas cantidades de nutrientes por un número de calorías relativamente bajo (29 kcal por cada 100 gramos de producto). El berro posee una gran cantidad de agua y fibra, por lo que, además de hidratarnos, nos sacia y ayuda a regular nuestra digestión. Otro de los motivos por los que es tan saludable es su capacidad diurética, que lo convierte en el alimento ideal para aquellas personas que sufren de retención de líquidos. También está indicado en casos de edemas y cistitis, así como para combatir de manera natural la hipertensión arterial.
Su aporte de vitaminas es muy alto, siendo la vitamina C una de las que más abunda en su composición. Aunque siempre se ha considerado a la naranja como una de las más ricas en este nutriente, lo cierto es que en este aspecto, los berros las superan. Se estima que 100 gramos de berros aportan el doble de vitamina C que las naranjas. Conviene recordar que dicha vitamina es clave para la correcta asimilación del hierro, y cumple una función muy importante a la hora de reducir el estrés oxidativo y fortalecer el sistema inmune. Las vitaminas A, D, E y del grupo E también están presentes en los berros. Su aporte de ácido fólico (vitamina B9) lo convierte en un alimento ideal para embarazadas, pero también en casos de anemia.
El berro aporta gran cantidad de minerales. Entre ellos destacan el yodo, el zinc o el hierro, este último clave para proteger los huesos, mejora el crecimiento y reforzar el organismo gracias a su lucha contra la anemia. Ahora bien, si por algo destaca este vegetal es por la presencia de calcio en su composición, muy superior al que contiene la leche. En concreto, los berros aportan 170 mg de calcio por cada 100 gramos de producto.
Consúmelo fresco en ensalada o como ingrediente de sopas y cremas de verdura.