La familia es, para muchas personas, un refugio de amor y seguridad. Sin embargo, existen casos en los que este vínculo se convierte en una trampa mortal. A lo largo de la historia, diversas mujeres han sido víctimas de quienes, en teoría, debían protegerlas. El libro 'Familias Asesinas' de Victoria Pascual Cortés expone cómo, en algunos clanes, la traición, el abuso y el asesinato se gestan en el interior del hogar. De hecho hace un tiempo ya hablamos de los patrones que se repiten en las familias que terminan protagonizando crímenes, pero hoy vamos a enfocarnos en cómo estas traiciones afectaron, por desgracia, a las mujeres.
En este artículo, exploraremos los casos más estremecedores en los que la confianza fue traicionada, las víctimas fueron silenciadas y los crímenes, en muchos casos, olvidados. Porque cuando el peligro acecha desde dentro, las mujeres quedan atrapadas en una pesadilla sin salida.
Banaz Mahmod: víctima de un crimen de honor
Uno de los casos más escalofriantes recogidos en Familias Asesinas es el de Banaz Mahmod, una joven kurda-británica que fue asesinada por su propia familia en 2006. Banaz había huido de un matrimonio forzado y se enamoró de un hombre que su familia no aprobaba. Esta decisión, considerada una “deshonra”, selló su destino.
Victoria Pascual Cortés describe el horror de su historia: “Banaz pidió ayuda en múltiples ocasiones, pero sus súplicas fueron ignoradas. Su muerte fue planeada meticulosamente por su padre y sus tíos, quienes decidieron que su vida no valía más que la reputación familiar”. Finalmente, fue secuestrada, violada y asesinada. Su cuerpo apareció en una maleta enterrada en un jardín. Su caso es un recordatorio de cómo, en ciertas culturas, la mujer sigue siendo vista como un símbolo de honor, y su vida, una moneda de cambio.

Christine y Léa Papin: cuando el abuso lleva al horror
Las hermanas Papin, Christine y Léa, fueron víctimas de una familia disfuncional y un sistema que las explotó hasta llevarlas al límite. Criadas en un hogar de violencia y abandono, encontraron refugio en el servicio doméstico, pero esto solo reforzó su aislamiento.
Según Victoria Pascual Cortés, “las Papin desarrollaron un vínculo simbiótico que las alejó del mundo y alimentó su resentimiento hacia sus empleadores, quienes actuaban como figuras parentales de opresión”. En 1933, las hermanas asesinaron brutalmente a su patrona y a su hija en un ataque de furia descontrolada. Su historia muestra cómo la falta de amor y el abuso pueden torcer el destino de quienes solo buscaban afecto.
Candace Raquel Craig y Salia Hardy: la traición definitiva
El caso de Candace Raquel Craig y su hija Salia Hardy es uno de los más impactantes del libro. En 2023, esta madre fue acusada de asesinar y descuartizar a su hija en un acto de violencia extrema. La joven, que había descubierto irregularidades en las finanzas de su madre, se convirtió en una amenaza para ella.
“Cuando la familia se convierte en un campo de batalla, las mujeres pueden ser las principales víctimas”, explica Pascual Cortés. En este caso, el instinto de protección materna se transformó en un impulso destructivo, dejando una marca imborrable en la historia criminal.

Los gemelos Montoya Navarro: el lazo sanguíneo que mata
Otro caso impactante es el de los gemelos Montoya Navarro, quienes crecieron en un ambiente de odio y violencia. Criados por una madre manipuladora y un padre ausente, desarrollaron una relación tóxica que los llevó a cometer crímenes juntos.
“La relación de estos hermanos estaba marcada por una dependencia insana que los llevó a cometer asesinatos con una frialdad aterradora”, escribe Pascual Cortés. Sus víctimas, en muchos casos, eran mujeres de su propia familia, a quienes veían como obstáculos en su oscura complicidad criminal.
Un libro necesario para entender la traición familiar
Las historias de estas mujeres nos recuerdan que la violencia no siempre viene del exterior. En muchas ocasiones, el enemigo duerme bajo el mismo techo. El libro de Victoria Pascual Cortés es una obra imprescindible para comprender cómo los lazos de sangre pueden convertirse en cadenas mortales.

A través de un análisis detallado y una narrativa envolvente, la autora nos sumerge en los casos más perturbadores de traiciones familiares, dándole voz a las víctimas olvidadas. Una lectura que invita a la reflexión y nos desafía a cuestionar la imagen idealizada de la familia.