En España, hay una innumerable variedad de pueblos que destacan por su belleza y encanto. Desde los pintorescos pueblos blancos de Andalucía hasta los históricos enclaves de la Costa Brava como este del que venimos a hablar hoy: cada rincón ofrece un paisaje único y una rica herencia cultural. Las calles empedradas, las casas con flores en los balcones y los impresionantes entornos naturales crean un ambiente idílico que atrae a visitantes de todo el mundo. Estos pueblos son verdaderas joyas que invitan a explorar su historia, gastronomía y tradiciones.
Por ejemplo, aquí os dejamos los cinco pueblos más bonitos de España según la IA de ChatGPT. Pero centrándonos, en este caso, en el que fuera "paraíso místico" de Dalí, ofrece multitud de sensaciones al visitante. Es un lugar privilegiado de calles y rincones que atrapan los sentidos, y del arte eterno del genio que lo consideraba "el pueblo más bonito del mundo" y que dejó allí gran parte de su legado. Además, Cadaqués abraza el mar con su maravillosa costa mediterránea y sus calas. Y es que, acoge un gran número de estos rincones maravillosos de playa en parajes recónditos y tranquilos. A continuación te dejamos una guía completa para que te adentres en el encanto de este enclave de ensueño de la Costa Brava.
Qué ver y hacer en Cadaqués
Las calas infinitas y el paisaje costero

Entre las mejores, la Cala Guillola, cuyo nombre proviene de las raposas que antaño abundaban en la zona, y que se encuentra en el llamado mar d’avall, el mar de abajo del Cabo de Creus, a cobijo de la tramontana y con aguas cristalinas, un paraíso natural. Para llegar a ella, hay que tomar un sendero que comienza en una zona conocida como S’Alqueria, por la carretera del faro.
Otro camino de tierra que discurre desde la Cala Montjoi a la de Jóncols, y que puede hacerse a pie, ofrece las calitas más bellas de toda la Costa Brava. La Cala Culip, en el mar d’amunt, el mar de abajo, por su parte, es el lugar donde se inspiró Salvador Dalí para realizar algunas de sus obras más emblemáticas, como El gran masturbador. Se recorre en unos 30 minutos, pero no querrás irte.
En el entorno de todas estas calas es posible disfrutar de actividades como el buceo o el senderismo, por supuesto, y puedes encontrar mucha información y enlaces en www.turismocadaques.com. Otra de las mejores formas de disfrutar de la agreste costa de Cadaqués es observarla desde un barco. En Portlligat se puede coger el Adela, una embarcación tradicional que realiza excursiones por la bahía. Para elegir entre las opciones que ofrece visita www.excursions-cadaques.com.
El casco viejo, la gastronomía y la música

Su centro histórico es ideal para ir de compras. Los comercios se disponen en edificios antiguos, blancos, típicos de un pueblo marinero. Tiendas de artesanía, de recuerdos, ropa o dulces... Entre estos últimos, los más típicos son los taps, en forma de tapón de corcho con bizcocho y azúcar glas, que pueblan la zona. Además, todos los lunes se celebra un mercadillo situado muy cerca del centro, al final de la Ribera de Sant Vicenç. Asegúrate, debido a posibles restricciones, de que se celebra sin problemas en www.cadaques.cat.
Debido a que Cadaqués se encuentra en un privilegiado enclave marítimo y a que en su entorno se da una gran abundancia de terreno rocoso, el pescado y el marisco tienen un delicioso sabor. Merece la pena probar las anchoas, que se conservan durante 10 meses en sal y pimienta, o platos típicos como el cap-roig con patatas -un guiso de escorpena al horno-, los erizos, los mejillones y la cotizada langosta.
Asimismo, cada año se celebra, normalmente la primera quincena de agosto, el famoso Festival Internacional de Música de Cadaqués, otra excusa perfecta para acudir: www.festivalcadaques.com. Por si fuera poco, en su famosa Calle Miquel Rosset, llena de pubs y terrazas con vistas, se vive una rica vida nocturna. Aquí se reunía la denominada Gauche Divine, un grupo de artistas de los 60, bohemios e intelectuales, al que pertenecían desde Serrat a Terenci Moix.
Iglesia de Santa María

Se encuentra en la cima más alta de la villa. Desde allí se contemplan hermosas vistas de la bahía y del Faro de la Cala Nans, por lo que su visita es obligada. Su emplazamiento es uno de los miradores más bellos de España. Se llega atravesando el casco histórico y todo el trayecto es espectacular, lleno de casas encaladas. La iglesia es originaria del siglo XIII, pero sufrió modificaciones hasta el siglo XVI, desde el que mantiene su estilo gótico.
Está formada por una sola nave con capillas laterales y un ábside poligonal, y por un campanario octogonal, con todo el exterior encalado en blanco, como el resto del emplazamiento. Su retablo barroco es originalísimo, y cuenta con detalles que ensalzan su origen, en madera y pan de oro, como la imagen de pescadores locales, que sufragaron la obra.
El Triángulo Daliniano

El llamado Triángulo Daliniano se forma entre las localidades de Figueres, Púbol y Portlligat, ya que la vida y obra del artista se desarrolló en esta zona, salvo por la etapa en que vivió en Nueva York. Así, primero, podremos visitar la Casa-Museo del pintor, escultor, diseñador, grabador, escenógrafo y escritor, el máximo exponente del surrealismo español, que encontró que el mar de su vida "cada vez se parecía más" al que él pintaba, como contó a Lorca en una carta.
Está en la cala de Portlligat, a tan solo 15 minutos andando de Cadaqués. Antiguamente, no era más que un grupo de barracas para pescadores. El Teatro-Museo, que recoge una amplísima colección permanente de su obra y exposiciones temporales, se encuentra en Figueres, en la plaza que lleva su nombre. Estos dos destinos cuentan con visitas virtuales online y un precio -mejor adquirir las entradas de forma anticipada- de 17 euros como tarifa general y 14 en precio reducido.
El último vértice del triángulo lo forma el Castillo Gala Dalí de Púbol, también en la plaza de esta localidad que lleva su nombre, abierto desde 1996, un edificio medieval que Dalí dedicó a su obra en torno a Gala. Las entradas tienen un precio máximo, en este caso, de 9 euros. Es recomendable organizar la visita con tiempo o hacerlo de forma guiada, ya que suele ocupar dos días. Hay que tener en cuenta las distancias entre las poblaciones: hay 40 km entre Figueres y Portlligat -en Cadaqués- y la misma distancia entre Figueres y Púbol. Toda la información que necesitas está en www.salvador-dali.org.
El cabo de Creus

Entre acantilados y sinuosos caminos de piedra, se llega al punto más oriental de la Península Ibérica, el lugar donde amanece en España en primer lugar. Piérdete entre las calas y disfruta de este Finisterre catalán, un lugar privilegiado. Hay restaurantes y bancos para disfrutar de sus puestas de sol. Puedes llegar paseando o en un ameno viaje en barco.
El Parque Natural de Cap de Creus es ideal para alquilar un kayak, hacer senderismo o rutas en bici, y el viaje en un catamarán es de visita obligada. La visita a la Punta de Cap de Creus es de acceso libre a pie y en bici, pero el acceso en vehículo está restringido. Infórmate en www.elsblausderoses.com, sito en el paseo marítimo del municipio de Roses, a menos de 7 km de Cadaqués.
Cómo llegar a Cadaqués

Desde Barcelona
- En coche: toma la AP-7 y luego la GI-614. El trayecto dura aproximadamente 2 horas y 30 minutos.
- En autobús: hay autobuses directos desde la Estación de Autobuses de Barcelona (Estació del Nord) que tardan alrededor de 3 horas y 30 minutos.
- En tren: puedes tomar un tren a Figueres y luego un autobús a Cadaqués. El viaje total puede tardar entre 3 y 4 horas.
Desde Girona
- En coche: toma la GI-623, que te llevará a Cadaqués en aproximadamente 1 hora.
- En autobús: hay autobuses que conectan Girona con Cadaqués, con un tiempo de viaje de alrededor de 1 hora y 30 minutos.
Desde Madrid
- En coche: la ruta más rápida es por la A-2 y luego la AP-7, con un tiempo de viaje de aproximadamente 6 horas.
- En tren: toma un AVE a Figueres y luego un autobús a Cadaqués. El viaje puede durar entre 5 y 6 horas en total.
Desde Valencia
- En coche: viaja por la A-7, y el trayecto dura alrededor de 3 horas y 30 minutos.
- En autobús: hay rutas que conectan Valencia con Cadaqués, pero puede requerir un transbordo en Barcelona.
Desde Bilbao
- En coche: la ruta más directa es a través de la AP-68 y la AP-7, con un tiempo de viaje de aproximadamente 7 horas.
- En tren: toma un tren a Barcelona y luego sigue el trayecto hacia Cadaqués, lo que puede tomar alrededor de 8 horas en total.
Desde Málaga
- En coche: puedes tomar la A-7 y la AP-7, lo que puede tardar entre 9 y 10 horas.
- En avión: vuela a Barcelona y luego sigue el trayecto a Cadaqués.
Dónde dormir en Cadaqués

- Hotel Sol i Vida. Este hotel de 3 estrellas ofrece habitaciones modernas y cómodas, muchas con vistas al mar. Tiene una piscina al aire libre y está cerca del centro. Precios: Desde 100 € por noche.
- Hotel Rocamar. Situado frente al mar, este hotel cuenta con un restaurante y terraza con vistas espectaculares. Las habitaciones son sencillas pero acogedoras. Precios: Desde 80 € por noche.
- Hostal Marina. Un hostal familiar que ofrece un ambiente acogedor. Las habitaciones son limpias y confortables, y se encuentra a pocos pasos de la playa. Precios: Desde 60 € por noche.
- Hotel Playa Sol. Este hotel ofrece acceso directo a la playa y habitaciones con balcón. Es ideal para quienes buscan comodidad y cercanía al mar. Precios: Desde 90 € por noche.
- Camping Cadaqués. Para los amantes de la naturaleza, este camping ofrece bungalows y parcelas. Ideal para familias y viajeros con espíritu aventurero. Precios: Desde 50 € por noche (en bungalow).
- Hotel Port-Lligat. Ubicado cerca de la casa de Salvador Dalí, este hotel tiene un ambiente íntimo y vistas al mar. Las habitaciones son elegantes y confortables. Precios: Desde 140 € por noche.
Dónde comer en Cadaqués

- Restaurant Es Baluard. Situado en un antiguo almacén de pescado, ofrece platos mediterráneos con un toque contemporáneo. Destacan los mariscos y pescados frescos. Precio: Entre 25-50 € por persona.
- Casa Anita. Un restaurante acogedor y famoso por su ambiente bohemio. Ofrecen una variedad de tapas y platos locales. Ideal para probar la cocina típica de la región. Precio: Entre 15-30 € por persona.
- La Gritta. Con vistas al mar, este restaurante combina platos de la cocina mediterránea y local. Perfecto para disfrutar de una comida con vistas impresionantes. Precio: Entre 20-40 € por persona.
- El Bar de Cadaqués. Un lugar informal donde se pueden disfrutar tapas y raciones a buen precio. Es ideal para una comida rápida o un aperitivo. Precio: Entre 10-20 € por persona.
- Port Lligat. Situado cerca de la famosa Casa de Salvador Dalí, ofrece platos de temporada con ingredientes frescos. El ambiente es tranquilo y acogedor. Precio: Entre 20-35 € por persona.
- Taverna del Capità. Un lugar pintoresco que ofrece cocina tradicional. Sus paellas y arroces son muy recomendados, así como los platos de carne. Precio: Entre 15-30 € por persona.
- El Xiringuito. Este chiringuito junto a la playa es perfecto para disfrutar de una comida informal con tapas, bocadillos y paella. Precio: Entre 10-25 € por persona.