El increíble truco para guardar tu edredón ahorrando espacio

Te enseñamos hasta dos trucos similares para guardar el edredón nórdico y que abulte lo menos posible en el canapé o en el altillo del armario.
Claves para elegir  un buen edredón

Estos días primaverales de entretiempo se suelen aprovechar para cambiar el armario de temporada y preparar la casa para la época estival. Eso pasa, por ejemplo, por guardar los edredones nórdicos hasta que el frío vuelva. Es una pena despedirse de ellos por dos motivos: lo gustosos que son cuando hace frío y todo el espacio que ocupan cuando están guardados.

Menos mal que existen las redes sociales para “fichar” trucos. En Instagram abundan las cuentas especializadas en trucos para mejorar el orden en casa, muchos de ellos consejos que nos permiten ahorrar espacio a quienes no tenemos o tiempo o capacidad para pensar cómo ahorrar espacio. 

A continuación, vamos a enseñarte las dos formas más eficientes que hemos descubierto en las redes sociales para guardar un edredón nórdico sin que ocupe medio canapé o altillo del armario y, no menos importante, sin que se te desmorone una vez doblado, cuando lo coges en brazos para guardarlo en su sitio durante el verano. 

Dormitorio

Forma 1 para guardar el edredón

Los dos trucos que vamos a mostrarte para guardar el edredón nórdico son muy similares. El objetivo, de hecho, es parecido: conseguir plegarlo con forma cuadrada de manera que se enganche en sí mismo y no se deshaga su forma.

El primer método que compartimos se lo hemos visto a Miriam, de la cuenta de Instagram @pinceladas_de_mi_hogar. Ella propone una forma muy sencilla de doblar el edredón nórdico en cinco pasos. Eso sí, hay que hacer las cosas con buena letra, sin correr, para no hacer mal ningún paso.

En primer lugar, una vez extendido el edredón, dobla los dos lados hacia el centro, montando uno sobre el otro. A continuación, haz una doblez desde uno de los extremos y luego haz lo mismo, pero dos veces, desde el otro extremo.

Verás que te quedan los dos extremos que has doblado tocándose, hacia el interior del edredón. Solo tienes que meter el lado que has doblado dos veces dentro del lado que has doblado una vez. Para ello, simplemente tienes que dar una vuelta más al edredón nórdico.

De esta forma, el nórdico tendrá forma cuadrada y no se saldrá, por lo que es muy fácil guardarlo tal cual, en bolsa o funda. 

Cama Hotel marriot - Hotel Marriot

Método 2 para guardar el edredón

El segundo método, que es similar, se lo hemos visto a @seeetcarolblog. El primer paso es estirarlo bien y doblar como si hicieras el dobladillo de la sábana pero hacia arriba. Después, coge un lateral y dobla hacia dentro.

A continuación, lleva el otro extremo por encima del otro lado que ya habías doblado. El cuarto paso es doblar dos veces hacia dentro el extremo que todavía no has doblado, el opuesto al que habías hecho una especie de dobladillo. Tienes que conseguir una forma de cuadrado ya que al doblar la segunda vez verás que se monta encima del otro lado del edredón.

El quinto y último paso de este método consiste en dar la vuelta al cuadrado creado o levantarlo para sacar la especie de bolsillo que has creado con esta técnica. Ese bolsillo sirve para envolver todo el nórdico y que así no se desmorone ni coja volumen. Así estará listo para guardar.

Una vez doblado, mete el edredón en una bolsa quitando bien el aire para que se conserve mejor y también ocupe menos espacio porque no cogerá tanto volumen como si lo dejas sin bolsa. 

Recomendamos en