Recetas de galletas hay muchas, existen infinidad de variedades de cookies y francamente, es complicado quedarse solo con unas. Cada receta tiene su aquel y hace que queden de una manera u otra. Normalmente, si horneas galletas, lo más probable es que queden crujientes y si las conservas durante varios días, se vayan secando un poco con el paso del tiempo. Precisamente eso es lo que queremos evitar en esta ocasión.
Chewy cookies. Posiblemente lo hayas leído por ahí o fácilmente habrás avistado este término en las redes sociales. Hace referencia a esas galletas que tienen un aspecto crujiente por fuera pero que por dentro están tiernas, como si estuvieran menos cocidas. Son, de hecho, como las cookies típicas de película americana, y podemos decir que saben parecido: de película. Te van a dar ganas de tomarlas con un vaso de leche, y no nos extraña. Pero, ¿cómo conseguir ese punto blando en el interior y bien hecho por fuera?
Aquí no hay magia que valga y el truco está en los ingredientes, la forma que damos a las cookies y el tiempo de horneado. Así que te aconsejamos seguir las instrucciones que te damos y seguir nuestra receta estrella, la receta definitiva para unas galletas superchewy.

Ingredientes (para 20 galletas, aproximadamente):
- 170 gr de mantequilla sin sal
- 165 gr de azúcar moreno
- 100 gr de azúcar blanco
- 1 huevo
- 1 yema de huevo
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla
- 300 gr de harina
- 1 cucharadita de levadura
- 1 ½ cucharaditas de maizena
- Una pizca de sal
- Chips de chocolate
Elaboración:
- Fundir la mantequilla en el microondas y mezclarla con los dos azúcares, el blanco y el moreno.
- Añadir el extracto de vainilla y el huevo, así como la yema de huevo.
- Ahora, vamos con los ingredientes secos: agregar la harina, la levadura, la maizena, la sal, y mezclar hasta conseguir una mezcla equilibrada.
- Añadir las pepitas de chocolate que queramos, un poco según nuestra preferencia. Remover bien.
- Ahora llega el momento de reservar la masa resultante. Este es uno de los trucazos que te damos: intenta guardar la mezcla en el frigorífico durante medio día o un día entero. Hay quien las deja reposar durante la noche y también está perfecto. Estas horas son el tiempo de reposo que necesita la masa para poder obtener unas cookies de ensueño después. Como sabemos que a veces no dispones de tanto tiempo, puedes introducir la masa durante 30 minutos en el congelador, pero no más tiempo ya que se quedaría demasiado dura. No obstante, es preferible dejar reposar en la nevera durante varias horas.
- Una vez transcurrido el tiempo de reposo, hacer bolitas de masa (como estará fría, será fácil de manipular) y colocarlas en la bandeja del horno. He aquí otro tip estrella: haz las bolitas más altas que anchas y no te excedas con el tamaño: han de ser similares a una pelota de ping pong.
- Respecto al tiempo de horneado, es necesario controlarlo muy bien. Deben cocerse durante 10 minutos a 160º, nunca más tiempo. Si las dejamos más, quedarán más secas por dentro y no es lo que buscamos en esta ocasión.
- Cuando haya pasado el tiempo, retirar del horno aunque puedan tener aspecto de crudas. Solemos decirlo, pero cuando se enfrían ya quedan en su punto y ganan un poco de dureza.
- Deja que se enfríen… Y ya tienes tus chewy cookies, irresistibles y chocolateadas. De esta manera, te durarán tiernas más tiempo.