¿Pensando ya en el menú que prepararás en Navidad? Más allá del típico pavo o cordero asado, los entrantes a base de mariscos o canapés o las bebidas espumosas como el champán, para triunfar en estas fechas y sorprender a tus invitados no hay nada como un buen postre que remate un menú por todo lo alto. Este año te hemos contado cómo preparar trufas de chocolate, pudin de chocolate, tarta de chocolate… y ahora te proponemos un plato más con cacao -el ingrediente estrella que nunca defrauda- con el que te chuparás los dedos esta Navidad: una mousse de chocolate y mascarpone de lo más cremosa y esponjosa.
Este delicioso y suave postre se prepara en muy poquito tiempo y su receta es super fácil y económica, con tan solo un par de ingredientes comunes. ¡Toma nota!
Ingredientes que necesitas:
Para la mousse de chocolate:
- 2 Huevos grandes
- 150 gramos de chocolate negro (al menos un 70% de cacao)
- 80 gramos de azúcar blanco
Para la crema de mascarpone:
- 250 gramos de queso mascarpone
- 16 gramos de azúcar de vainilla
- 2 claras de huevo
Para decorar:
- Menta
- Arándanos
Cómo preparar esta mousse de chocolate
Empieza preparando la mousse de chocolate, separando las claras y las yemas de los huevos y batiendo las yemas con el azúcar en un bol. Por otro lado funde el chocolate al baño María y una vez esté completamente derretido, añádelo a la mezcla anterior de azúcar y yemas. Para terminar, monta las claras por separado y después, cuando tengas merengue, mézclalo en el bol anterior con el resto de ingredientes para formar una mousse cremosa y esponjosa.
Por otro lado, para montar la crema, echa el queso mascarpone en una ensaladera. Añade el azúcar vainillado y bate todo con un tenedor hasta que obtengas una crema homogénea. Monta las claras en otro bol, incorpóralas a la crema anterior y guarda la mezcla final en la nevera durante una hora.
¡Y ya sólo queda montar el postre! Pasadas unas horas, reparte la mousse de chocolate en varios vasitos de cristal. Cúbrela con la crema de mascarpone y alísala con una cuchara. Vuelve a añadir una última capa de mousse de chocolate y para rematar el postre, decora la superficie con un puñadito de arándanos y una hojita de menta. Guarda los vasitos en la nevera durante al menos otras dos horas y sírvelos bien fríos. ¡Gustarán a todo el mundo!