En España, eso de que “una casa debe estar siempre limpia” no es solo un dicho, es casi una filosofía de vida. Y es que aquí, la limpieza va mucho más allá de una simple necesidad; es parte de nuestra cultura y tradición. Pasar la mopa y el plumero es casi un ritual tan arraigado como la siesta. Pero, ¿alguna vez te has preguntado por qué tenemos esta obsesión por la limpieza? La respuesta puede estar en nuestro sentido de hospitalidad que se enseña desde la infancia; siempre estamos dispuestos a recibir a cualquiera en casa, pero no se tolera ni la más mínima mota de polvo.

Claro, no solo queremos que nuestra casa se vea bien para los demás, sino que también es una cuestión de sentirnos bien en nuestro propio espacio.
En muchos hogares españoles, el fin de semana no empieza hasta que todo está reluciente. Así que, mientras en otros países pueden aprovechar el sábado para descansar, muchos de nosotros estamos ya en pie, armados con bayeta y fregona, asegurándonos de que cada rincón de la casa esté perfecto. Y aquí no acabamos, porque tener la casa limpia es casi tan importante como preparar una buena comida.
15 manías de limpieza muy españolas que nos hacen únicos

1. Madrugar para limpiar: ya lo sabes, en España, el sábado es sinónimo de limpieza general.
2. La obsesión con el bicarbonato: lo usamos para todo, desde limpiar el horno hasta como desodorante en la nevera.
3. Supersticiones ante todo: como eso de no barrer de noche, ¿quién quiere llamar a la mala suerte?
4. Vinagre para un brillo extraordinario: es el aliado perfecto para ventanas y espejos sin marcas.
5. Fregar el suelo a diario: que no pase un día sin que el suelo esté limpio. Por favor y gracias.

6. Cambio semanal de sábanas: imprescindible para un descanso rejuvenecedor.
7. Limpieza regular de ventanas: con tanto sol o lluvia, ¡queremos que entre bien limpio!
8. Platos limpios siempre: nada de dejarlos para mañana.
9. Desinfectar el baño a fondo cada semana: ni de broma esperar una semana para hacerlo.
10. Limpieza mensual de electrodomésticos: para que duren más y funcionen mejor.

11. Uso de zapatillas de casa: muchas personas en España tienen la costumbre de cambiarse de calzado al entrar en casa, usando zapatillas específicas para interiores para evitar traer suciedad del exterior.
12. Cambio y lavado de cortinas cada cambio de estación: se cambian y lavan las cortinas al menos con cada cambio de estación para eliminar acumulaciones de polvo y refrescar el ambiente. ¿Te suena de algo?
13. Ventilación diaria de todas las habitaciones: abrir ventanas a diario para airear bien la casa y reducir la humedad y los ácaros del polvo es una práctica muy arraigada.
14. Ambientadores por doquier: para que todo huela tan bien como luce.
15. Pulido frecuente de suelos de madera: para mantener ese brillo especial.