Steve Jobs, fallecido en 2011, pero sigue siendo una de las personas más importantes de la historia moderna. Y no es sorpresa para nadie. Dirigió varias empresas, entre las que destaca nada más y nada menos que Apple, la misma que revolucionó los ordenadores personales, las comunicaciones y la industria musical y cinematográfica.
Pero por sobre todas las cosas, Jobs sabía hablar. Mejor dicho, era experto en la comunicación. Si hablamos de las habilidades comunicativas de los altos ejecutivos, Jobs se posiciona como uno de los primeros. Basta con buscar en Google "Steve Jobs" para pasarse un día leyendo entrevistas o viendo vídeos de sus numerosos discursos.
Sus citas también están por todas partes, es por eso que en estas líneas hemos incluido aquellas que puedan inspirar o aconsejar a cualquier persona independientemente del ámbito en el que trabajen.
Está claro que el recurso más preciado que tenemos es el tiempo. No lo desperdicies.
"Si eres aquello en lo que te centras, entonces cómo y dónde empleas tu tiempo en tu negocio dice mucho de la dirección que estás tomando. Y no puedes volver atrás e intentarlo de nuevo: el tiempo sólo se mueve en una dirección", Jobs dijo esto en una entrevista con Playboy en 1985.
Todo lo que te rodea y que llamas vida fue inventado por personas que no eran más inteligentes que tú.
"...Una vez que descubres esto, tu vida se vuelve mucho más interesante porque puedes cambiarlo y construir tu propio camino", señala Jobs en una entrevista. Se refería a como todos somos educados para aceptar la vida tal y como nos ha sido transmitida. Desafiaba a la gente a mirar a su alrededor y cambiarlo, porque ¿por qué aceptar algo inventado por otros mucho tiempo atrás?
A veces la vida te golpea en la cabeza con un ladrillo. No pierdas la fe.
Jobs dijo esto en relación con su despido de Apple. En cuanto a malas experiencias profesionales, pocas son peores que ser despedido por la empresa que fundaste. La historia de Jobs es inspiradora. Su experiencia demuestra que cuando las cosas se desmoronan, es una oportunidad para empezar de nuevo. "Era una medicina de sabor horrible, pero supongo que el paciente la necesitaba", dijo Jobs.