De acuerdo con la Organización Mundial de la
Salud (OMS), lo ideal es tomar entre 1,5 y 2 litros de agua al día. Ahora bien, es importante tener en cuenta que, para llegar a esa cantidad, no es necesario beber dos litros de agua, ya que el cálculo de la OMS incluye todo lo que comemos a lo largo del día. Es decir, que también suma el agua de la lechuga de la ensalada, los tomates, la carne o el pescado de la cena, así como las infusiones o el café.
Entre las muchas funciones que dependen de la hidratación, destacan que facilita la digestión, mejora el rendimiento de los riñones, protege las articulaciones o regula la temperatura del cuerpo. El agua, por tanto, es absolutamente imprescindible para el correcto funcionamiento del organismo. Eso sí, es
importante tomar la suficiente, ya que, por debajo de lo recomendable, estaríamos hablando de deshidratación. Un estado que puede llegar a ser grave. Algunos de los síntomas de estar mal hidratada serían: dolor de cabeza, fatiga, mareos, estreñimiento, sequedad en la piel o irritabilidad.
Además de ser bueno para el correcto funcionamiento de los órganos, está comprobado que el consumo de agua en las cantidades adecuadas a lo largo del día aumenta la capacidad de concentración, la memoria y, lo que quizá pueda parecer más sorprendente, regula el estado de ánimo.
Veamos más en profundidad todos sus beneficios:
1-Alivia la fatiga
El agua te ayuda a recuperarte después del esfuerzo realizado en una sesión de gimnasia o tras una larga caminata. Además, cuando no bebes la cantidad de agua suficiente, el corazón tiene que trabajar más para bombear la sangre oxigenada a todas las células y órganos principales y eso puede causar fatiga. De modo que, cuando bebes agua en las cantidades recomendadas, restableces los niveles adecuados y te sientes mucho mejor.
2- Evita el estreñimiento
Según la prestigiosa Clínica Mayo, el agua ayuda a descomponer los alimentos para que el cuerpo pueda absorber sus nutrientes. Además, ablanda las heces, lo cual es clave para evitar el estreñimiento. Así que prioriza siempre el agua frente a otras bebidas, especialmente las azucaradas o los zumos
3-Cuida la piel
La hidratación es fundamental para lucir una piel tersa, joven y elástica. Para conseguir los niveles idóneos, es fundamental ingerir el agua suficiente. La piel está expuesta a infinidad de factores externos que la atacan constantemente, así que incluir la ingesta de agua como parte de tu ritual de belleza ayudará a aliviar los efectos del sol, el viento y la contaminación.
4-Ayuda a adelgazar
Una de las razones más atractivas y convincentes para tener a mano la botella de agua, sin duda, es que ayuda adelgazar. Esto es así no solo por la sensación de plenitud que produce y que hace que comas menos, sino porque está comprobado que acelera el metabolismo y que quema calorías. En concreto, por cada litro que bebes, se queman unas 46 calorías, lo que significa que, si tomas dos litros al día, quemarás 644 calorías a la semana.
5-Mejora el rendimiento mental
Todos los órganos del cuerpo funcionan mejor cuando están bien hidratados y el cerebro no es una excepción. Lo interesante es que, cuando esto ocurre, la memoria se agudiza y la concentración se intensifica. Por el contrario, cuando el órgano pensante está falto de agua, sus funciones se ven perjudicadas. En concreto, parece ser que la memoria a corto plazo se ve mermada, disminuye el tiempo de reacción y se pierde coordinación motora. Estas son parte de las conclusiones de un estudio de la Universidad de East London (Reino Unido).
