Las tablas de cortar de madera son uno de esos utensilios que están presentes en casi todas las cocinas. Cortamos fruta, carne, pan o verdura sobre ellas, muchas veces sin pensar demasiado en lo que va quedando impregnado con el uso. La madera, aunque estética y duradera, es un material poroso que puede retener humedad, olores y bacterias si no se limpia correctamente. Por eso es tan importante tener una rutina clara de limpieza y desinfección. No basta con enjuagarlas por encima. A largo plazo, una tabla mal cuidada puede convertirse en un foco de microorganismos y malos olores… y arruinar incluso la mejor receta. Para ayudarnos a mantenerlas como nuevas, recurrimos a una voz experta en la materia: Laura Varo, organizadora profesional conocida en Instagram como @ordena_t_.
Laura comparte a diario consejos de orden, limpieza y deco que se adaptan a la vida real. Y su truco para limpiar tablas de madera no puede ser más fácil, rápido y efectivo. Ya os hablamos de la razón por la que no deberías meter utensilios de madera en el lavavajillas. Y, en este artículo, te contamos cómo aplicar su método casero paso a paso y lo complementamos con otros sistemas naturales para mantener tus tablas impecables, desinfectadas y libres de olores. Porque limpiar bien también es una forma de cuidar lo que tenemos.
El truco de limpieza de la experta

Laura Varo lo tiene claro: no hace falta complicarse para tener buenos resultados. Su truco favorito para limpiar las tablas de madera consiste en mezclar bicarbonato con medio limón. Así lo explica en su post de Instagram: “Os dejo una forma súper fácil de limpiar nuestras tablas de madera. Además de conseguir que se le vaya el mal olor que pueda tener. Simplemente hay que poner un poco de bicarbonato y frotar con medio limón. Después, quita los restos y límpiala con la parte suave del estropajo, un poco de jabón de platos y agua caliente.”
El bicarbonato actúa como un limpiador suave, ideal para arrastrar manchas, mientras que el limón desinfecta y neutraliza olores. Un combo perfecto, natural y sin químicos agresivos. Lo mejor es que puedes hacerlo en un par de minutos después de cocinar.
Cómo lavar y cuidar tu tabla después de cada uso

Además de este truco puntual, Laura y otras expertas recomiendan mantener una rutina diaria de limpieza. Después de cada uso, lava la tabla con agua caliente y jabón suave, usando la parte no abrasiva del estropajo para no dañar la superficie. Luego, sécala al momento con un paño limpio.
Evita sumergirla en agua o dejarla secar al aire de forma prolongada, ya que la humedad continua puede deformarla o agrietarla. Una tabla seca siempre será una tabla más limpia.
Una vez al mes, puedes aplicar aceite mineral o de coco para nutrir la madera y evitar que se reseque o se agriete. Solo necesitas un paño y unas gotas: masajea la superficie y deja que lo absorba durante la noche. Además, te dejamos tres zonas de tu cocina que tienes que limpiar todos los días y que no imaginabas.
Otros métodos de limpieza para una desinfección eficaz

Además del limón y el bicarbonato, puedes usar vinagre blanco como desinfectante natural. Sus propiedades antimicrobianas ayudan a mantener la tabla libre de bacterias. Rocíalo directamente y deja actuar unos minutos antes de enjuagar y secar.
También puedes usar sal gruesa con limón como exfoliante natural. Espolvorea la sal sobre la tabla y frota con medio limón como si fuera una esponja. Esta mezcla limpia, desodoriza y deja un acabado fresco.
Y por último, no olvides dónde la guardas: una tabla bien limpia pero mal almacenada vuelve a contaminarse. Mantenla en un lugar seco y bien ventilado, nunca pegada a la pared húmeda ni dentro de un cajón cerrado.
Con estos consejos, y el truco estrella de @ordena_t_, tendrás tus tablas limpias, seguras y en perfecto estado por mucho más tiempo. Una limpieza sencilla que marca la diferencia en tu cocina.