Los errores que cometes con los boquerones en vinagre
Este plato tradicional de nuestra gastronomía es un auténtico manjar si se prepara bien. Te contamos cuáles son los fallos que te impiden sacarle el máximo partido.
Los boquerones en vinagre son solo una de las muchas formas que existen de preparar este pescado azul, y también uno de los platos típicos que podemos degustar en el bar o chiringuito de playa. Si quieres prepararlos tú misma en casa, tienes que saber que es muy fácil, solo tienes que asegurarte de seguir estos consejos que te damos y no cometer algunos errores básicos, que te vamos a explicar a continuación.
Al igual que otros pescados azules, el boquerón es una gran fuente de proteínas de alto valor biológico y un ingrediente con un alto contenido en omega-3, lo que le reporta muchas cualidades cardioprotectoras, como ayudar a tener a raya el colesterol malo y los triglicéridos, y contribuir a la fluidez del torrente sanguíneo. Todo esto previene problemas como coágulos o trombos. Por tanto, los boquerones en vinagre son un plato no solo delicioso, sino también saludable.
¿Quieres descubrir los errores que estropean tus boquerones en vinagre? Uno de los peores que podemos cometer es no congelarlos para evitar el anisakis, pero hay algunos más. Tenlos en cuenta cuando los vayas a preparar.
No comprarlos frescos
Si para cualquier preparación en crudo es importante que el pescado sea de calidad y fresco, en el caso de los boquerones en vinagre todavía lo es más. Durante los meses de primavera y verano es cuando el boquerón asciende a la superficie marina para reproducirse y alimentarse. En estos momentos, su grasa aumenta, intensificando también su sabor. Pero hay que comprarlos frescos, sobre todo porque es un pescado que vamos a congelar posteriormente.
Siempre que vayamos a consumir el pescado crudo es importante congelarlo previamente para destruir el anisakis. Aunque el vinagre mata a la mayoría de microbios, no es efectivo contra el anisakis. Por eso, los expertos recomiendan congelarlos a menos 20º durante cinco días para eliminar todo rastro de este parásito.
Es muy importante que el pescado esté bien limpio antes de nada, no solo para evitar microbios y parásitos, sino también para eliminar ciertas partes que pueden proporcionarnos un sabor amargo no demasiado agradable. Solo tienes que retirar la cabeza y tripas con los dedos. Después, abrir por la ventresca y extraer la espina central, para retirar las dorsales.
Ten en cuenta que cuanto más tiempo pasen los boquerones en vinagre, más cocinados quedarán. Si es lo que quieres, perfecto, pero si no, lo ideal es que no los dejes más de una hora. Un pequeño truco: cuando ya no tienen ese toque rojizo, es que están al punto. Si has diluido el vinagre en agua y hecho una cocción en vinagre corta durarán menos días en la nevera que si los hemos tenido mucho rato en vinagre sin diluir.
Una vez que hemos acabado de marinar los boquerones, es importante escurrirlos bien para que no continúen cocinándose. Ojo, no hace falta que los pasemos por agua, basta con escurrirlos bien. A continuación, debes introducirlos en un recipiente con aceite, mejor girasol que de oliva, pues este último es más fuerte y podría enmascarar el sabor del pescado.