Si algo no se puede negar es que la cocina no se concibe sin cebolla. Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, esta hortaliza es originaria de Asia central, y se trata de una de las más antiguas del mundo. Hoy en día se ha ganado a pulso su reputación de imprescindible.
Sin importar las diferencias que hay entre la cebolla, cebolla dulce, cebolla morada y cebolleta… Cualquiera que sea su versión, añade a los platos un toque de sabor y frescura. Tal y como menciona la nutricionista Tatiana Zanin, su consumo está indicado para combatir enfermedades como la gota, debido a sus propiedades diuréticas y, además, se recomienda para aliviar problemas respiratorios.

No obstante, hay un tipo de cebolla que está ganando cada vez más adeptos: la cebolla caramelizada. Y es que es un complemento que hace que instantáneamente el plato sepa mejor. Aunque pueda parecer obra de profesionales, prepararla en casa es muy sencillo y lo mejor de todo, súper sano porque no hace falta ni agregarle azúcar. Eso sí, requiere paciencia puesto que porque normalmente tarda entre 30 y 45 minutos en cocinarse.
Cómo preparar cebolla caramelizada sin azúcar

Ingredientes
- Cebollas blancas
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- Mantequilla o ghee
- Sal
Preparación
La autora de "Sano y variado " y "Cocina con olla multifunción", Laura García, recomienda calentar bien el aceite, la mantequilla o el ghee a fuego bajo en una sartén o cocotte grande con tapa.
"Posteriormente se debe pelar y picar toda la cebolla en trozos o en tiras y ponerlas en la sartén o cocotte. Remover y colocar la tapa", añade.

Es importante cocinar a fuego lento, removiendo de vez en cuando, tal y como señala García. "Te recomiendo que te pongas a hacer otra cosa porque tardará unos 30 minutos en estar lista (depende de la cantidad de cebolla, podría ser algo más), pero no te vayas de la cocina porque te olvidarás de removerla y se quemará".
Por último, cuando esté bien dorada y tierna, la experta aconseja apagar el fuego y pasarlas a un recipiente de cristal con tapa para conservar la cebolla por más tiempo. "De esta manera te dura una semana en la nevera", concluye.