Esta salsa picante y ácida es una guarnición perfecta para carnes y pescados, aunque también puede utilizarse para acompañar tacos, nachos o quesadillas o rellenar incluso fajitas o sandwiches. Si quieres que sea mucho más espesa y sin trozos, pásala por una licuadora antes de servirla. ¡Tú eliges!
Ficha
Tiempo de preparación min
Tiempo de preparación min
Tiempo de cocción min
Porciones
Tipo de receta (n/a)
Ingredientes
- 1 piña fresca
- 2 chiles o guindillas
- Un manojo de menta fresca
- 1 cebolla morada pequeña
- 2 limones
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación
Recorta la cáscara de la piña y retira posible trozos marrones o defectuosos
Corta la pulpa en gajos, cortando y desechando la parte central
Después, fríelos en seco en una sartén grande a fuego medio durante unos 4 minutos, o hasta que se doren, volteándolos de vez en cuando
Retira la piña del fuego y pícala muy finamente, añadiendo los trocitos a un bol
Pica finamente las guindillas, la hoja de menta y la cebolla y agrégalas al bol
Exprime el jugo de los limones sobre el bol y rocía la mezcla con aceite de oliva virgen extra
Sazona al gusto
Remueve todos los ingredientes y deja la salsa reposar un par de minutos antes de servirla