El calabacín es una de nuestras hortalizas favoritas, está lleno de vitaminas, apenas aporta calorías y además es tan versátil que podemos incluirlo en multitud de recetas diferentes. Puedes prepararlo en crema, puré, relleno, en pisto, sofritos, para relleno de empanadas, para comerlo con pasta o arroz, como guarnición para carne o pescado…las opciones son infinitas. Lo mejor de todo, es que si lo cocinas de forma variada, nunca te cansarás de comer calabacín.
Asegúrate de comprarlos en buen estado para que los puedas conservar en casa el mayor tiempo posible en perfectas condiciones. Para ello fíjate en que la piel sea lisa y tersa y su textura sea firme. Lo mejor para conservar el calabacín en buen estado es guardarlos en piezas enteras en el cajón de las verduras y sin lavar, si los guardas con un poco de humedad empezarán a descomponerse mucho antes. Igualmente asegúrate de colocarlo alejado de frutas que desprendan etileno, como el plátano o el melocotón para evitar que tus calabacines amarguen cuando los cocines. Colócate el delantal y prepara esta sencilla receta donde el calabacín es el ingrediente principal.
Otras alternativas para los calabacines rellenos
- Si prefieres la carne al pescado, cambia los mejillones y el bacalao por trocitos de pechuga de pollo. Si cocinas esta versión, potencia aún más los sabores añadiendo al sofrito una pastilla de caldo de pollo.
- Enriquece la receta con una bechamel ligera. Mezcla 1 vaso de leche semidesnatada con 2 cucharadas de maicena calentando a fuego medio y sin dejar de remover con ayuda de unas varillas.
- Prepara una versión vegetariana sustituyendo el pescado y el marisco por soja texturizada. Sólo tendrás que hidratarla siguiendo las indicaciones del fabricante antes de añadirla a tu receta. Por si aún no la has probado, su textura es muy similar a la de la carne pero es 100% vegetal.
Ficha
Tiempo de preparación LowFatDietmin
Tiempo de preparación 30min
Tiempo de cocción 15min
Porciones 4
Tipo de receta (n/a)
Ingredientes
- 4 calabacines pequeños
- 1 cebolla
- ½ pimiento verde
- ½ pimiento rojo
- 40 g de mejillones
- 100 g de bacalao desalado
- 3 cucharadas de tomate frito
- Aceite de oliva
- Albahaca
- Pimienta
- Sal
Preparación
Lava bien los calabacines eliminando posibles restos de tierra y córtalos a la mitad de manera horizontal
Sácales la pulpa con ayuda de una cuchara sopera sin que se rompa la base y reserva la pulpa
Cuece los calabacines en abundante agua salada 10 minutos, escúrrelos y déjalos aparte
Pela y pica finamente el ajo y la cebolla y rehógalos en una sartén con aceite de oliva 10 minutos
Limpia y corta en daditos los pimientos y agrégalos a la cebolla para completar el sofrito
Cocina 5 minutos más y sazona al gusto
Agrega el bacalao desmigado y la pulpa de calabacín que habías dejado reservada, y cocina 2 minutos antes de incorporar el tomate frito
Cocina todo el sofrito 3 minutos a fuego lento y tapado para que no salpique
Cuece los mejillones al vapor y conforme se vayan abriendo, retírales la cáscara y añádelos al sofrito
Rellena los calabacines con el sofrito, decora con unas hojitas de albahaca y sirve de inmediato