Cómo hacer un pan de manzana y canela
Ahora que nos encontramos en otoño, es cierto que cuando comienza a hacer algo más de frío siempre nos apetece pasar un rato más en la cocina elaborando preparaciones al horno. Y este pan de manzana y canela se convierte en una ocasión ideal.
Que la manzana y la canela son dos de esos ingredientes que se llevan a la perfección en la cocina, de eso prácticamente no habría lugar para las dudas. Y es que el sabor dulce y ligeramente ácido de la manzana se combina muy bien con el sabor especiado de la canela molida, que también tiene la cualidad de realzar su sabor.
Y lo cierto es que no es necesario complicarse demasiado en la cocina. Basta simplemente con recortar unos cuantos trozos de manzana y cocinarla ligeramente en una sartén con un poco de extracto de vainilla y algo de canela molida. O incluso hacerles un corte, añadir canela por encima y algo de agua, e introducirlas en el horno. Y las especias suelen ser ingredientes tradicionalmente relacionados con el otoño.
Pero si deseas disfrutar de elaboraciones esponjosas, ideales para acompañar el café del desayuno o el té de la tarde, no puedes perderte este pan de manzana y canela. Es más, dependiendo totalmente de tu preferencia dulce-salado, puedes sustituir la mantequilla sin sal por una opción salada.
Receta de pan de manzana y canela

Receta de pan de manzana y canela
Ingredientes:
- ½ taza de harina
- ¾ cucharadita de levadura en polvo
- 3 cucharaditas de canela molida
- ½ cucharadita de sal
- 2 huevos
- 1 taza de manzanas peladas y picadas
- ½ taza de mantequilla sin sal ablandada
- ½ taza de azúcar
- ¼ taza de azúcar moreno
- ½ taza de jugo de manzana
- ½ taza de nueces picadas
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Elaboración:
Empezamos precalentando el horno a 180 ºC. Engrasamos un molde alargado con un poco de mantequilla, y enharinamos la superficie ligeramente. Reservamos.
En un cuenco grande combinamos la harina con la levadura en polvo, la canela molida y la sal. En otro cuenco grande combinamos la mantequilla a temperatura ambiente, el azúcar blanco y el azúcar moreno, hasta que esté suave.
Añadimos los huevos a la mezcla de mantequilla y batimos muy bien hasta que se incorporen completamente. Añadimos el jugo de manzana y el extracto de vainilla, y volvemos a mezclar de nuevo.
Agregamos gradualmente los ingredientes secos mientras mezclamos, hasta que se hayan incorporado completamente. Lavamos muy bien las manzanas, las pelamos y las picamos. Picamos también las nueces.
Vertemos en el molde e introducimos en el horno, horneando entre 45 a 55 minutos. Estará listo cuando al insertar una brocheta en el centro salga limpia. Eso sí, en caso de que se empiece a dorar mucho por encima, y aún se encuentre crudo en el centro, es aconsejable poner un poco de papel aluminio por encima, lo que evitará que la corteza se queme.
Cuando esté listo retiramos del horno y enfriamos sobre una rejilla. Cuando se haya enfriado por completo, retiramos del molde y servimos.
Algunos consejos útiles
Lo cierto es que en esta receta puedes elaborar cualquier variedad de manzana, aunque es verdad que existen distintos tipos que tienden a ser mejores a la hora de cocinar al horno. Básicamente lo más recomendable es usar manzanas frescas.
Aunque si deseas que la manzana mantenga algo su estructura, y no se convierta en un puré en el horno, la variedad Granny Smith es una opción muy interesante, ya que aguanta el calor a la perfección, y tiene un sabor muy equilibrado, dado que es dulce y agrio a la vez.
Este pan se mantendrá a la perfección en la nevera durante una semana, siempre y cuando lo envolvamos bien. También es posible conservarlo en el congelador, donde puede permanecer en buen estado hasta un mes.
A la hora de degustarlo, se puede comer solo, con un poco de miel o sirope de ágave por encima, o acompañarlo con una bolita de helado de vainilla. El helado de caramelo salado también es una opción única muy interesante.