Esto va dirigido a las que habéis ido a comprar un paquete de copos de este cereal y no sabéis muy bien qué hacer con él, más allá de echarlos en la leche. Os resulta sosa, pero eso es porque aún no la conocéis en profundidad. Te vamos a iluminar con 10 maneras deliciosas y nada aburridas de comer avena, aunque lógicamente hay muchas más que deberás explorar por ti misma. En cuanto acabes con la galería, este alimento saldrá de su olvido para ser la nueva estrella de la cocina. Si las influencers de la vida healthy la adoran, ¿cómo no vas a hacerlo tú?
La avena es muy utilizada en los desayunos, no hay más que ver el perfil de las redes sociales de algunas famosas. La propia Pilar Rubio nos contaba hace unas semanas qué tomaba cada mañana y ahí estaba este cereal. "Me encanta desayunar un buen bol de fruta de temporada, batido de proteínas con copos de avena, nueces, semillas de cáñamo, con plátano y con leche de coco", confesaba. El porridge también se ha puesto muy moda y te recomendamos probarlo solo, con plátano y canela o con frutos secos. Lo de mezclar los copos con yogur también es otro básico, pero hay mucho más. Pan, repostería, guisos, cremas... la avena tiene muchos usos culinarios.
Y te estarás preguntando por esa manía que le ha entrado a todo el mundo por comer este alimento. Pues de manía nada, porque tiene muchísimas propiedades beneficiosas para el organismo que no debes pasar por alto. Toma nota de algunas:
- Te ayuda a perder peso, porque sus carbohidratos son de absorción lenta, lo que hace que estés más saciado durante más tiempo y, por tanto, evites el picoteo.
- Ayuda a controlar el azúcar en sangre debido a su alto contenido en fibra soluble. Los betaglucanos forman una especie de gel durante la digestión que hace que el vaciado del estómago sea más lento, así como el paso del azúcar a la sangre.
- Reduce el colesterol malo gracias a los polifenoles, que ayudan a evitar la oxidación del colesterol. Para aprovechar esta cualidad, se recomienda acompañar la avena de alimentos que sean altos en vitamina C como algunas frutas.
- Cuida la microbiota intestinal, alimenta los tejidos de los músculos y equilibra el sistema nervioso.
Dicho todo esto, sólo queda aprender a introducirla en la cocina y disfrutar.
Rebozados
Sí, quizá no lo habías pensado pero los copos de avena son una maravilla si lo que quieres es un rebozado crujiente para tus platos y encima más sano y con más nutrientes que la harina tradicional.

Pan de avena
SI eres de las que te gusta experimentar con este alimento básico, prueba a hacer en casa tu propio pan con avena, para lo que tendrás que este cereal con harina de trigo a partes iguales. Como guinda decóralo con granos y logra un pan casero con vitaminas, calcio y fósforo.

Porridge
El desayuno de las influencers que si aún no has probado debes hacerlo. Es 'healthy' y versátil, ya que puedes mezclarlo con frutas, semillas y frutos secos. ¿Cómo se hace el porridge? Fácil: calienta leche (de vaca o vegetal), echa los copos de avena y deja cocinar un par de minutos. Luego, ya puedes innovar en los toppings.

Barritas de cereales
Ideal para un tentempé de media mañana o de tarde, y lo mejor es que las hagas tú misma. Sólo necesitarás miel, sirope de ágave o similares para que te sirva de base. Caliéntalo e incorpora la avena junto a frutos secos troceados y algún tipo de semilla, les damos forma y listo. Puedes hornearlas o dejarlas enfriar en el frigo, depende de la receta.

En batido
Otra opción ideal para empezar el día con un cóctel de nutrientes y aporte energético. Echa a la leche tus copos de avena, añádele plátano maduro en trozos y un poco de canela, bátelo todo y listo. Puedes hacerlo con la fruta que quieras, añadirle cacao en polvo, otros cereales... Hay todo un mundo de batidos disponible.

En ensalada
Una de las maneras más socorridas y sencillas de incorporar la avena en tu dieta sin que te resulte un rollo consiste en espolvorear unos copos en tu ensalada. La ventaja es que que los ingredientes a elegir son infinitos: lechuga, tomate, aguacate, trozos de salmón, semillas de lino... y este cereal también se suma al equipo 'salad'.

En cremas
¿Sabías que la avena es perfecta para espesar cremas de verduras? Lo que tienes que hacer es añadir unos puñados de copos mientras estás cociendo las verduras en el agua para que se ablande. Al triturarlo le dará consistencia y también suavidad al plato. También puedes emplearla en las salsas.

Tortitas
Otro clásico que hará de tus mañanas una delicia. Rápidas y sencillísimas de preparar: avena, huevo, un poco de leche (es opcional) y si no quieres añadir azúcar mezcla un plátano. Puedes coronarlas con un poquito de miel.

Galletas de avena
Una opción saludable y saciante si te encantan estos dulces... Menos harina de trigo y copos de avena para sustituir parte de la proporción necesaria, y lo que le quieras poner de extra, como pepitas de chocolate. ¿Lo mejor? Quedan súper crujientitas.

Tartas saladas
Aunque las quiches se suelen hacer con masa quebrada, prueba a elaborar la base con avena integral. De esta manera será menos calórica y más nutritiva que la tradicional. La masa se hace con los copos, huevo, aceite o mantequilla.
