Las castañas, en vitamina B y en minerales como el calcio, el magnesio y el fósforo.
Seguramente habrás oído alguna vez que las castañas engordan, pero ¿qué hay de cierto en esto? No hay ningún alimento que pueda engordar y/o adelgazar per se. Las castañas están compuestas en su mayor parte por agua, son ricas en fibra y sacian el apetito. Son bajas en grasas (en 100 gramos puede haber unos 4 gramos de grasa, cantidad bastante menor a la de otros frutos secos) y también tienen un buen aporte energético.
Cómo pelar las castañas
Para pelar las castañas de forma sencilla hay un truco infalible: hacemos un pequeño corte en cada castaña (esto es fundamental para que no revienten), las ponemos dentro de un recipiente con agua y lo metemos en el microondas durante unos 10 minutos aproximadamente. Si ponemos el microondas a máxima temperatura, con unos segundos bastará. Después lo sacamos y con el cuchillo vamos quitando la piel de las castañas, que gracias al calor saldrá con mucha más facilidad.
Si no tienes microondas, otro truco eficaz es escaldarlas, es decir, les hacemos un pequeño corte y las metemos en agua hirviendo durante un minuto, más o menos. Después las sacamos y las enfriamos bajo el grifo para, a continuación, retirarles la cáscara y la piel con un cuchillo.
Cómo cocerlas
Para cocer las castañas lo primero es hacerles un pequeño corte con un cuchillo. Después, las echamos en un cazo con agua, las dejamos cocer durante unos 25 minutos aproximadamente, las dejamos enfriar lo justo para no quemarnos los dedos y con el cuchillo las pelamos, retirando bien la piel interior, ya que su sabor es amargo. Al agua para cocerlas se le puede añadir un poco de sal si las vamos a utilizar en una receta salada, un poco de azúcar si preferimos que sean más dulces o incluso unos granos de anís.
Para asar las castañas

- Al fuego: podemos asar las castañas al fuego y, para ello, se recomienda utilizar una sartén cuyo fondo tenga agujeros. Les hacemos un corte (previamente lavadas y secadas) y las ponemos en la sartén a fuego medio durante una media hora, hasta que veamos que están hechas. Es conveniente moverlas de vez en cuando.
- Al horno: las lavamos, secamos y hacemos los respectivos cortes. A continuación, precalentamos el horno a unos 200º con calor arriba y abajo y cuando esté listo las colocamos sobre la bandeja y las introducimos durante unos 30 minutos a unos 200º. Vamos observando cómo van y cuando llevemos la mitad del tiempo más o menos, les damos la vuelta para que se hagan bien por todos los lados.
Prueba estos trucos y consejos y disfruta del sabor de las castañas estos días de otoño.