El papel de aluminio es un elemento común en la mayoría de las cocinas, utilizado principalmente para envolver alimentos antes de almacenarlos en el refrigerador o para cubrir bandejas durante el horneado. Sin embargo, más allá de estas aplicaciones convencionales, el papel de aluminio tiene una variedad de usos sorprendentes y prácticos que pueden simplificar nuestras tareas diarias y resolver problemas cotidianos de manera ingeniosa. En este artículo, exploraremos nueve usos poco conocidos del papel de aluminio que seguramente te sorprenderán.
Conservación de alimentos
Probablemente todos sepamos que el papel de aluminio conserva los alimentos frescos, sin embargo, también deberíamos saber que envolver cualquier tipo de alimento horneado en varias capas de aluminio mantiene su textura suave como si estuviera recién salido del horno.

Un eficiente afilador
Cortar repetidamente un pedazo de papel aluminio doblado en varias partes, consigue que las tijeras que han perdido parte de su potencial vuelvan a tener un filo más efectivo.

Contra el óxido del estropajo
Es muy común que los estropajos de acero, con los que limpiamos parte de nuestra batería de cocina, llenen de óxido la encimera, el recipiente donde lo depositamos o cualquier superficie en la que esté. Cortar un pedazo de aluminio y situarlo en la zona donde reposa el estropajo evita la mancha de óxido tan difícil de eliminar.

Contra la grasa del horno
Sustituye el estropajo común con el que sueles limpiar tu horno por una bola de papel de aluminio. Si se frota sobre las superficies que tienen grasa y le aplicamos después una mezcla de limón y bicarbonato, nuestro horno estará preparado para que volvamos a pasar el aluminio y conseguir así el efecto de limpieza deseado.

Unas ollas brillantes
Si después de limpiar nuestra olla la frotamos con una bola de papel de aluminio conseguiremos el brillo que ha perdido con el paso de los años y el uso.

pilas que vuelven a funcionar
Aunque pensemos que las pilas de nuestros juguetes o aparatos electrónicos están gastadas, en muchas ocasiones lo que sucede es que han dejado de hacer contacto ya que uno de los extremos se ha aflojado. Si cortamos un pequeño pedazo de papel de alumnio y lo situamos entre el polo de la pila y la zona de contacto, nuestro electrodoméstico volverá a funcionar.

Una plancha limpia
El paso del tiempo deteriora nuestra plancha creando una capa oscura que, en ocasiones, echa a perder nuestra ropa. Para suavizar este efecto tan molesto basta con poner una lámina de papel de aluminio sobre la mesa, esparce sal y mueve la plancha como si estuvieses planchando.

Limpiar la plata
Recuperar el brillo de nuestra cubertería de plata puede ser más sencillo de lo que creemos, solo tenemos que cubrir un recipiente con papel de aluminio y lo llenamos de agua caliente y sal. A continuación sumergiremos los cubiertos que deseemos limpiar y listo.

Decoloración
Todos hemos visto como en nuestro salón de belleza habitual, la estilista utiliza papel de aluminio para separar los mechones de nuestra coloración. Pues bien, lo cierto es que tiene una explicación. Mientras que los gorros de plástico diseñados para este fin cortan o deterioran el mechón de pelo, el papel de aluminio se convierte en la mejor opción para lograr el efecto deseado y no dañar la salud de nuestro cabello.
