Las 7 frases de mi psicóloga que más me han ayudado

A veces, una simple frase puede cambiar nuestra perspectiva y ayudarnos a encontrar calma en medio del caos. Descubre estas reflexiones que te invitan a replantear tus pensamientos y fortalecer tu bienestar emocional.
frases de mi psicologa que más me han ayudado
Foto: @therapyside_es - frases de mi psicologa que más me han ayudado

A veces, las frases más simples encierran las verdades más poderosas. En un mundo donde la inmediatez nos arrolla y las redes sociales parecen dictar nuestras referencias, detenerse un momento a reflexionar sobre ciertas palabras puede ser el recordatorio que necesitamos para recuperar el rumbo.

Recientemente, la cuenta de Instagram @therapyside_es, un espacio dedicado a la psicoterapia online y el bienestar emocional, compartió una serie de frases que han resonado en muchas personas. Con más de 74.5 mil seguidores, esta plataforma se ha convertido en un referente para quienes buscan conectar consigo mismos. Hoy quiero compartir contigo estas frases que, quizás, también iluminen tu camino.

"Las redes sociales no son el único referente. Lee, escucha, habla… hay muchas otras fuentes de inspiración."

Hoy en día, las redes sociales parecen marcar el ritmo de todo: lo que vestimos, lo que comemos, incluso cómo nos sentimos. Pero la verdadera inspiración no solo está en una pantalla. Una conversación con alguien especial, un buen libro o simplemente salir a pasear pueden abrirte nuevos horizontes. Es fácil caer en la trampa de la comparación cuando pasamos horas deslizando el dedo en la pantalla. Pero la inspiración real no solo está en Instagram o TikTok. Está en las conversaciones con los amigos, en los libros olvidados en la mesilla, en una canción que te sorprende en la radio. Leer, escuchar y hablar sigue siendo el mejor camino para encontrar nuevas perspectivas.

"Que eso haya salido mal, no significa que todo vaya a salir mal. Date más oportunidades."

Es fácil desanimarse cuando algo no sale como esperabas, pero eso no significa que todo esté perdido. Cada error es una oportunidad de aprendizaje. No te castigues por lo que no funcionó, en su lugar, intenta de nuevo con más sabiduría y confianza. Cuando algo no sale como esperábamos, tendemos a generalizar y asumir que todo lo demás también se vendrá abajo. Pero una mala experiencia no define el resto de tu historia. Date más oportunidades. Permítete el derecho a equivocarte y volver a intentarlo. Nadie tiene éxito sin antes haber fracasado unas cuantas veces.

"Cuando te hagan un cumplido y no sepas responder: agradece. No hace falta restarle valor."

¿Por qué nos cuesta tanto aceptar un cumplido? Si alguien te dice que te ve bien, que admira tu trabajo o que le gusta lo que haces, simplemente di “gracias”. No minimices lo que eres ni lo que logras. ¿Cuántas veces te han dicho "qué guapa estás hoy" y has respondido "bah, es el maquillaje"? Aprender a aceptar un cumplido sin restarle valor es una lección de amor propio. Un simple "gracias" es suficiente. No minimices tus logros ni la forma en la que los demás te perciben. Recibir también es un acto de generosidad.

"Si te hace feliz a ti, ¿por qué te preocupa que a los demás no?"

Demasiado a menudo buscamos la validación de los demás antes de permitirnos disfrutar algo. Pero la única opinión que realmente importa es la tuya. Si te hace bien, si te llena, si te hace sonreír, eso es suficiente. Si algo te hace feliz a ti, ¿por qué te preocupa lo que piensen los demás? A veces, buscamos tanto la aprobación externa que olvidamos disfrutar lo que genuinamente nos llena. No necesitas justificar tus gustos, decisiones o pasiones. Lo que importa es que te haga bien a ti.

"Algunas cosas no tienen una solución inmediata. A veces, necesitamos procesarlas antes."

Vivimos en una época donde todo parece necesitar una respuesta rápida. Pero hay situaciones que requieren tiempo para ser entendidas, asimiladas y, finalmente, superadas. Permítete sentir, reflexionar y sanar a tu propio ritmo. No todo se arregla de inmediato. Hay heridas que necesitan tiempo para cicatrizar, ideas que requieren maduración y emociones que deben ser procesadas. La inmediatez no siempre es la respuesta. Aprender a pausar y permitirnos sentir puede ser el verdadero camino hacia la solución.

"Piensa en tus relaciones como si fueran un añadido. Que te aporten, pero que no te hagan falta."

Las relaciones sanas no deberían ser una necesidad desesperada, sino un complemento que suma a tu vida. Rodéate de personas que te inspiren y te hagan crecer, pero sin depender de ellas para ser feliz. Las conexiones con otras personas son valiosas, pero no deberían ser la base de nuestra estabilidad emocional. Piensa en ellas como un añadido, no como una necesidad. Las relaciones que realmente valen la pena son aquellas que te aportan sin hacerte sentir que dependes de ellas para estar bien.

"En lugar de preguntarte por qué, pregúntate para qué."

Cuando algo difícil sucede, solemos preguntarnos “¿por qué a mí?”. Pero cambiar la perspectiva y preguntarnos “¿para qué?” nos ayuda a ver el aprendizaje detrás de cada experiencia. Cada reto tiene un propósito. En vez de quedarte atrapada en la pregunta "¿por qué me pasa esto?", intenta cambiarla por "¿para qué me está pasando?". Este pequeño ajuste mental puede transformar la forma en que enfrentas los desafíos. Todo lo que ocurre tiene un propósito, incluso si al principio no lo ves con claridad.

El consejo de Arthur C. Brooks, psicólogo de Harvard, para liberarte de los impulsos infelices, es simple pero poderoso: 'Si quieres ser más feliz, deja de buscar la felicidad en el lugar equivocado'. A menudo, nos obsesionamos con alcanzar el éxito, la aprobación o el reconocimiento externo, cuando en realidad, la clave está en cultivar el bienestar desde dentro.

Las palabras tienen poder. Pueden ser un recordatorio amable en los días difíciles o el empujón que necesitas para avanzar. ¿Cuál de estas frases resuena más contigo hoy?

Recomendamos en