Las alcaparras son el fruto del alcaparro (Capparis spinosa), un arbusto originario de Asia. Pequeñito, de color verde oscuro y con un sabor amargo, este alimento está muy ligado a la dieta mediterránea y triunfa especialmente en Italia, aunque también es frecuente en la gastronomía griega y, por supuesto, la española.
Las alcaparras son el botón floral, antes de desarrollar el fruto, del arbusto anteriormente mencionado. No debemos confundirlas con los alcaparrones, mucho más grandes y similares a las aceitunas, y que son el fruto ya maduro de la planta. Se trata de un alimento muy saludable gracias a su alto aporte de fibra y sus pocas calorías, además de vitamina K, E y C, y minerales como hierro, magnesio y potasio. También son buenas aliadas para combatir el envejecimiento debido a su contenido en antioxidantes.
Al natural tienen un sabor amargo y un fuerte aroma que puede no ser del agrado de todos. Esta peculiaridad se debe al ácido cáprico que contienen y que, una vez preparadas, eliminan, quedando con un sabor parecido al de las aceitunas. Sin embargo, es más frecuente encontrar las alcaparras en conserva, encurtidas en una solución de vinagre blanco y sal. Aunque solemos consumirlo a modo de aperitivo saludable, lo cierto es que este alimento tiene mucho potencial en la cocina y puede usarse en infinidad de recetas.
Las alcaparras son una de las joyas de la gastronomía italiana. En dicho país se utilizan mucho para elaborar pastas (de hecho, una de sus recetas más famosas, la pasta a la puttanesca, lleva este ingrediente), pizzas y focaccias. Combina muy bien con carnes blancas, como el pollo, pero también con todo tipo de pescados, siendo los ahumados uno de sus grandes acompañantes. También es típico encontrar las alcaparras en platos como el tartar de carne o de pescado, y en salsas como la tártara o la remoulade, esta última típica de la cocina francesa.
Ya sean aperitivos, platos principales o entrantes, las alcaparras tienen cabida en infinidad de platos. Te proponemos ocho ideas deliciosas para sacar partido a este versátil encurtido. ¡Fíchalas!
Pasta con alcaparras y atún
Las alcaparras pueden ser un buen ingrediente para dar vidilla a tus platos de pasta. En Italia son famosos los espaguetis a la putanesca, una receta que incorpora este fruto. También puedes optar por un plato de pasta con atún y alcaparras, una increíble combinación a la que te volverás adicta.

Pescado con alcaparras
Las alcaparras maridan a la perfección con el pescado, sobre todo con el salmón, el bacalao, la trucha, los arenques y las salazones de atún y bonito. Añádelas picadas, enteras, frescas o salteadas (¡triunfan en cualquier versión!) y darás un toque increíble a tus recetas con productos del mar.

Tartar con alcaparras
Otra buena manera de sacar partido a las alcaparras en la cocina es agregarlas al tartar, ya sea de carne o pescado. De hecho, es un ingrediente bastante típico en este tipo de elaboraciones, aunque hay quien decide prescindir de él porque su sabor es bastante singular.

Tosta de pescado ahumado con alcaparras
Las anchoas maridan a la perfección con ingredientes cuyo sabor es potente, como por ejemplo las anchoas o los boquerones. Añade el pescado y un poco de rúcula sobre una tosta y tendrás un picoteo sencillo, rápido y sobre todo, delicioso.

Pollo asado con alcaparras
Las carnes blancas, como el pollo asado, se benefician mucho del sabor de las alcaparras. También van muy bien con las carnes rojas al equilibrar la grasa de estas. Fríelas hasta que estén ligeramente crujientes y añádelas a tu carne favorita para otorgarle una textura de lo más especial.

Ensalada de patata con alcaparras
Muy propia de los meses de verano, la ensalada de patata. Además de este tubérculo, la receta en cuestión suele llevar aceitunas verdes o negras, cebolla o cebolleta, pimiento verde y/rojo crudo y atún o bonito en aceite, además de un buen aliño. Hay quien introduce variaciones agregando otro tipo de ingredientes, como por ejemplo alcaparras o pepinillos.

Pizza con anchoas y alcaparras
Si todavía no has probado la pizza con anchoas y alcaparras, sin duda deberías hacerlo. La combinación de las anchoas y alcaparras frescas (sin hornear) con el resto de ingredientes de la pizza es sencillamente espectacular.
