Con los productos etiquetados con “light” o “sin azúcar” conviene leer la letra pequeña, que en este caso es la lista de ingredientes. Así lo advierten los especialistas en nutrición, que ponen algunos ejemplos. Uno de los más representativos es el del chocolate, del que vamos a hablar a continuación.
La dietista nutricionista Blanca García-Orea Haro, @Blacanutri en Instagram, donde divulga acerca de su especialidad, expone los motivos por los que ella no recomienda el consumo de chocolate sin azúcar. Cuenta la experta que este producto “está lleno de edulcorantes que pueden causar síntomas digestivos, como gases o hinchazón y tienen efecto laxante”. Esto significa, y así lo puedes comprobar si lees el etiquetado con atención, que no contienen azúcar, tal y como anuncian a bombo y platillo en su envase, pero sí otros ingredientes sustitutivos del azúcar.
Por ello, la experta no lo recomienda en general, “sobre todo no recomiendo su consumo en personas que sufran de inflamación intestinal, colon irritable o intolerancias a la fructosa o sorbitol”, asegura.
CdoSpEqAmvrLa cuestión que aborda García-Altea es que un chocolate negro con azúcar, pese a que contiene este ingrediente malsano, lo tiene en cantidades controladas, que además son aptas para personas que sufran alguno de los problemas médicos anteriormente citados. “Estas personas serán capaces de digerir el chocolate “normal” (no zero ni sin azúcar) mucho mejor y sin estos síntomas”, expone. Eso sí, advierte de que “Siempre teniendo en cuenta usar un buen chocolate negro (>85%)”, que además son chocolates “perfectamente apto para los intolerantes a la lactosa”, concluye.
Para saber si el chocolate negro (a partir del 85%) es bueno, una pista es la lista de ingrediente. Según la nutricionista, solo debería llevar manteca de cacao, cacao en polvo o pasta de cacao, azúcar y, en algunos casos, como mucho, “suelen llevar vainilla u otro ingrediente”, señala.
Porcentajes de azúcar controlados en >85%
Para explicar en detalle su recomendación de no tomar chocolate “sin azúcar”, Blanca García-Orea Haro compara dos productos con el 85% de cacao, uno “normal” y otro sin azúcar”.
Para intentar explicar por qué ella recomienda en chocolate “normal”, indica que un producto con el 90% de cacao contiene 0,7 gramos de azúcar por cada 10 gramos, que es el peso aproximado de una onza de este producto —incluso el del 90% es recomendable tomarlo de forma ocasional y en cantidades muy moderadas; por debajo del 85%, los nutricionistas, en general, no lo recomiendan—.
Hay que tener en cuenta en este sentido las recomendaciones médicas al respecto del consumo de azúcar diario. La Organización Mundial de la Salud (OMS), máxima referencia, aconseja reducir su consumo al 5 por ciento de la ingesta calórica diaria, lo que equivale a aproximadamente a 25 gramos al día. En el chocolate del 90% estamos hablando de 0,7 gramos por cada onza, lo cual se ajusta a lo recomendado por la OMS.
Sigue siendo una cantidad razonable de azúcar la que contiene una onza de chocolate del 85%, pero ya dobla su contenido con respecto al del 90%. Pasa a 1,5 gramos por cada 10 gramos del producto, según indica Blanca García-Orea Haro. Este es un dato llamativo porque apenas en un 5% menos de cacao pero más del doble de azúcar.
Esta cantidad se duplica, literalmente, en el chocolate de 70% de cacao, ya que contiene 3 gramos de azúcar por cada 10, y se dispara hasta los 5 gramos en los chocolates con leche, donde la mitad de lo que ingerimos, aproximadamente, es azúcar. Por eso se trata de un producto que en términos de salud solo no aporta nada positivo, sino que resta y encima, por sus altas calorías, desequilibra mucho la “balanza” de nuestra dieta.