Los macarrones son una de esas comidas clásicas que nos hacen sentir reconfortados cada vez que los comemos. Y es que la pasta es un alimento versátil, económico y muy fácil de preparar.
Sin embargo, ¿qué pasa si queremos darle un toque especial para no prepararla siempre de la misma manera? Es aquí donde entran en juego las típicas salsas con las que solemos acompañar a estos hidratos.
Con la elección adecuada, puedes transformar tus macarrones en un delicioso plato digno de un almuerzo en una plaza italiana. Por ello, aquí te presentamos cinco opciones diferentes con las que disfrutar de este plato, que ya es considerado como el favorito de muchos comensales.
1. Salsa de queso
En primer lugar, traemos la salsa de queso, un clásico infalible cuando se trata de comer macarrones. Para prepararla, necesitas derretir mantequilla en una sartén, agregar harina para espesar y luego verter lentamente la leche mientras revuelves hasta que espese.
Después, añade tu queso favorito (como cheddar o mozzarella) y sazona con sal y pimienta al gusto. Una receta simple y deliciosa con la que aportar un sabor especial a la pasta.
2. Salsa de tomate
Ahora vamos con otra de las clásicas opciones. La salsa de tomate es la elección más saludable para acompañar tus macarrones. Puedes optar por hacerla de manera casera, cocinando tomates frescos con cebolla, ajo, albahaca y orégano, o puedes utilizar una ya preparada y enlatada si buscas algo más rápido.
Este tipo de salsa es versátil y puedes personalizarla según tus gustos añadiendo verduras como champiñones, pimientos o zanahorias.
3. Salsa Alfredo
Por otro lado, traemos la salsa más famosa de Roma. La salsa Alfredo es una indulgente mezcla de mantequilla y queso parmesano ideal para los amantes del queso.
A día de hoy, hay varias versiones de este tipo de crema. A veces se utiliza bechamel para espesar la salsa y otras incluyen huevo y crema de leche.
Para prepararla, derrite mantequilla en una sartén, agrega crema y queso parmesano rallado, y revuelve hasta que la salsa se espese. Puedes añadir ajo para darle un toque extra de sabor.
4. Salsa pesto
Sin embargo, si buscas una opción más fresca y aromática, la salsa pesto es la elección perfecta. Esta salsa italiana está hecha a base de albahaca fresca, piñones, ajo, queso parmesano y aceite de oliva.
Simplemente mezcla todos los ingredientes hasta obtener una consistencia suave. Este tipo de salsa es vibrante y está llena de sabor, lo que le dará a tus macarrones un verdadero toque mediterráneo.
5. Salsa de champiñones
Para los amantes de los hongos, la salsa de champiñones es una excelente opción. Esta cremosa salsa se prepara salteando champiñones en mantequilla con ajo y cebolla, agregando posteriormente crema y queso parmesano hasta que se espese.
El resultado es una salsa rica y reconfortante que complementa a la perfección con la textura suave e insípida de los macarrones.
Tras conocer todas estas opciones, recuerda la importancia de una buena salsa en la preparación de este plato. Elige cuidadosamente la crema que mejor se ajuste a tus preferencias y dale un toque especial a esta simple receta.
