¿Te imaginas que las croquetas pudieran ser también dulces? Pensándolo bien, podríamos montar un negocio de croquetas dulces, a ver qué tal. Desde luego, si están tan ricas como estos dulces fritos de manzana, que de aspecto recuerdan mucho a las croquetas, de ahí que en el titular los hayamos bautizado como croquetas dulces, sería el negocio del siglo. De momento, nos conformamos con enseñarte a hacer esta receta original de corte tradicional para que puedas disfrutarlos en casa.
La receta en cuestión es de Loli Domínguez, cuyo canal de Youtube sobre comida casera es una de esas fuentes de inspiración magníficas para mejorar el recetario casero. No en vano, cuenta con más de dos millones y medio de seguidores en dicha red social, donde comparte recetas tan interesantes y tan sabrosas como esta que reproducimos en esta pieza.
La receta en cuestión es muy sencilla de ejecutar pero requiere tiempo y mimo, como todo lo que tenga que ver con la repostería. Se trata, a grandes rasgos, de preparar una masa dulce con manzana en dados a la que luego damos forma de croquetas que, una vez fritas, rebozamos en azúcar y canela. ¡Espectacular!
La propia cocinera dice que están “absolutamente deliciosos” estos dulces fritos de manzana, una receta de la abuela de una amiga suya que es todo un tesoro que afortunadamente ha compartido con todos nosotros.
Tienes que probar estas croquetas dulces, como postre, merienda o como bocado dulce a la hora del café. Te enseñamos a prepararlos a continuación.
Croquetas dulces de manzana de Loli Domínguez
Ingredientes
- 1 manzana de tamaño grande (250 gramos aproximadamente)
- 1 huevo de tamaño grande
- 40 gramos (3 cucharadas) de azúcar
- 1/2 cucharadita de esencia o extracto de vainilla
- 30 gramos (3 cucharadas) de aceite de girasol o de sabor neutro
- 45 ml (3 cucharadas) de leche
- 185 gramos (2/3 taza) de yogur natural sin azúcar
- Una pizca de sal
- 380 gramos de harina de trigo común
- 7 gramos (1/2 cucharada) de levadura química o polvo de hornear
- Abundante azúcar para rebozar el dulce frito
- Canela molida, cantidad al gusto, para rebozar el dulce frito
- Abundante aceite para freír.
Elaboración
Paso a paso
Pela la manzana y córtala en cuartos para retirarle el corazón.
Pica la manzana en dados pequeños y reserva.
En un recipiente grande, vierte un huevo grande.
Añade al bol el azúcar (tres cucharadas) y un chorrito de extracto de vainilla.
Mezcla hasta que todo se integre.
Incorpora 30 gramos (tres cucharadas) de aceite de girasol o un aceite alternativo de sabor neutro. Mezcla de nuevo.
Añade la leche (tres cucharadas) y el yogur, que puede ser griego o natural pero sin azúcar. Mezcla e integra todo de nuevo.
Añade una pizca de sal y la manzana cortada en dados.
Mezcla hasta que la manzana se impregne con la mezcla líquida.
Con la ayuda de un colador, tamiza 380 gramos de harina de trigo común, “de todo uso”. Hazlo en varias tandas. Podéis ajustar la cantidad de harina en función de la humedad de la harina y del agua que tenga el huevo.
Incorpora también 7 gramos de levadura química (polvo de hornear). Tamiza todo y mezcla con una espátula hasta que todo esté integrado.
La masa estará correcta cuando esté consistente pero se pueda manipular con las manos. Que no esté dura pero “se pueda manipular con las manos”. Ajusta la cantidad de harina para ello si es necesario. El truco para saber si está en su punto es mojarse las manos con aceite y coger una porción de masa: si se puede manipular sin dificultad, estará lista.
Ponte cerca una bandeja enharinada y un cuenco con aceite y, una vez mojadas las manos con él, coge una porción de la masa y dale forma de croqueta alargada, tipo cilindro grueso. Coloca cada “croqueta” en la bandeja.
Repite el proceso hasta terminar con toda la masa. Saldrán más de 30 con estas cantidades. Reserva.
Prepara un recipiente con abundante azúcar mezclado con canela molida.
Prepara una sartén y calienta abundante aceite para freír los pastelitos o “croquetas dulces” porque la forma de freírlas es igual.
Cuando esté caliente pero no humedad, mójate las yemas de los dedos con aceite y coge los pastelitos para ir haciéndolos en la sartén.
Fríe todos los pasteles por tandas. Subirán a la superficie y se voltearán pero si no lo hacen, ayúdales.
Cuando estén dorados, sácalos a una bandeja o plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
Todavía muy calientes, a medida que fríes, pasa por la mezcla de azúcar y canela cada pastelito. Si no lo haces en caliente, el azúcar no se adhiere.
