Hoy día, cuando hablamos de alimentación saludable, casi siempre aparece la recomendación de dar prioridad a los productos frescos. No es casualidad que nutricionistas y expertos en salud insistan tanto en la importancia de visitar el mercado, llenar la cesta de frutas, verduras y alimentos de temporada y apostar por una cocina más casera y equilibrada. Sin embargo, no siempre es posible llevar este ideal al pie de la letra. El ritmo de vida, la falta de tiempo o la organización familiar nos lo ponen difícil. Y es justo aquí donde las conservas pueden convertirse en nuestras grandes aliadas, pues son versátiles, prácticas y, si se eligen bien, perfectamente compatibles con una dieta sana. Así lo asegura la experta en nutrición de Mi Conserva, Sandra Vaquera Ruiz.
La experta en nutrición asegura que “hoy, la sociedad está demasiado acostumbrada a vivir deprisa”, por este motivo cada vez más personas suelen recurrir a la comida rápida y, por ende, acaban teniendo un peor estado de salud y aspecto físico. Es en todos estos casos donde mejor encaja la “comida en conserva” comenta Sandra Vaquera, nutricionista de Mi Conserva, conservera artesana de Navarra. Y es que, como nos ella cuenta, “es compatible comer sano y no invertir mucho tiempo cocinando”, solo hay que saber elegir los mejores productos en cada momento.
Las conservas son sanas y mantienen todas las propiedades de los alimentos frescos
Una de las dudas más frecuentes es si las conservas mantienen las propiedades de los alimentos frescos. En el caso de verduras y legumbres la respuesta es sí. “Conservan todas sus propiedades nutricionales y características organolépticas, es decir, su sabor, textura y valor nutritivo”, asegura la experta. De hecho, en el caso de las verduras se podría decir que las propiedades son incluso mayores que las que se nos quedan olvidadas en la nevera y nos las comemos pasados demasiados días tras su cosecha, cuando han perdido parte de sus nutrientes. Asimismo, las conserveras trabajan con producto fresco, recién cosechado, por lo que no pierden sus propiedades.

Las conservas también nos permiten tener siempre en casa alimentos saludables y listos para incorporarlos a la dieta, incluso fuera de la temporada. Así, es mucho más fácil preparar cualquier día unas alcachofas o unas habas, sin mirar el calendario ni preocuparnos por si se encuentran en su punto. Además de garantizar que puedas disponer de verduras, legumbres o platos de cuchara cuando lo necesites, las conservas tienen una ventaja añadida: te ayudan a planificar mejor y a evitar el desperdicio alimentario.
Pueden ayudarte en tu día a día a hacerte más fácil la dieta

La clave para que las conservas encajen en una alimentación equilibrada está en cómo las combines y el papel que tengan en tu dieta. Son una opción ideal para improvisar comidas completas y saludables, sin renunciar al sabor ni a la variedad. “Basta con añadir una fuente de proteína de calidad –como pescado, huevo, carnes magras o legumbres– y una guarnición sencilla para obtener un plato nutritivo en pocos minutos”, nos aconseja la experta.
Desde unas alcachofas que acompañen a un pescado al horno, hasta una menestra convertida en plato único con huevo escalfado. Espárragos, tomates en conserva o verduras tradicionales permiten improvisar ensaladas templadas, guarniciones o platos de cuchara sin complicarse más en la cocina.
Hay solo dos cosas que pueden llevar las conservas saludables

A la hora de comprar conviene revisar bien el etiquetado. La clave está en que contengan solo ingredientes naturales y de calidad. “Hay que asegurarse de que no lleven conservantes, colorantes y de que el contenido de sal no sea muy excesivo. Lo recomendable es que no supere los 0,9 gramos por cada 100 gramos del producto”, recomienda Sandra.
Otro aspecto importante es fijarse en el porcentaje real del alimento principal –verdura, pescado, legumbres– que debe ser protagonista frente a aceites o caldos. Las conservas permiten disfrutar de productos fuera de temporada y tener siempre a la mano ingredientes saludables listos para usar
Top 5 conservas imprescindibles y cómo usarlas
Aunque a veces existe un ranking de qué 3 marcas de atún no deberías comprar en el súper según la OCU: ranking de peores latas en España, existen versiones saludables. Las conservas permiten disfrutar de productos fuera de temporada y tener siempre a la mano ingredientes saludables listos para usar. La nutricionista nos recomienda 5 conservas que son perfectas para la dieta.
Legumbres guisadas

Lentejas, garbanzos o alubias listas para emplear. Ideales para las ensaladas templadas con espinacas frescas, cebolla roja y huevo duro, o para un potaje exprés añadiendo solo un sofrito casero y unas verduras congeladas.
Verduras al natural

Espárragos, alcachofas, menestras o pimientos asados. Pueden ser la base de un plato completo como, por ejemplo, unas alcachofas salteadas con jamón y huevo poché o también una menestra enriquecida con pollo a la plancha.
Pescados en conserva

Atún, caballa o mejillones. Perfectos para improvisar una cena sana con una tosta de pan integral, base de pimientos asados y lomos de caballa, o como proteína en una ensalada de legumbres.
Tomate triturado o frito casero

Base imprescindible para pasta, arroz o guisos. Una salsa rápida de tomate y cebolla te resuelve una pasta con verduras y atún en solo unos minutos. Hay que buscar siempre opciones sin azúcares ni exceso de sal.
Platos tradicionales en conserva
Pochas, cremas de verduras o platos de cuchara. Puedes transformar unas simples pochas guisadas en todo un plato completo sumando arroz integral y unos tacos de bacalao, o una crema de calabaza en un entrante de lujo con unas virutas de jamón y picatostes.
Este artículo se publicó originalmente en la versión de papel 2013. El autor original es Inma Coca