Todas las frutas son muy saludables y recomendables en una dieta equilibrada. Ahora bien, si hablamos de las naranjas, estas son especialmente interesantes debido a su alto contenido en vitamina C. Esta vitamina interviene en la renovación celular, aclara las manchas y estimula la formación de colágeno. Por si fuera poco, este cítrico también mantiene las defensas en forma, de ahí que su consumo sea especialmente importante durante los meses de frío.
Aunque están disponibles todo el año debido a la gran cantidad de variedades que existen, las naranjas viven su mejor momento entre los meses de octubre y mayo. Ahora bien, no todas valen. ¿Cuántas veces te habrá pasado eso de ir a comerte una y que esté amarga? ¿O que no tenga apenas jugo? Si te encanta esta fruta y quieres aprender a identificar cuándo una naranja es de calidad, entonces tienes que fichar estos sencillos trucos.
Consejos para escoger las mejores naranjas
- El primer truco puede parecer una obviedad, pero nunca está de más comentarlo. A la hora de comprar una buena naranja, elige siempre las que más pesen, pues son las que contienen más zumo.
- Otro truco fundamental que no falla es su aspecto. Elige siempre las que tengan la piel tersa y uniforme y estén brillantes. Si están blandas o presentan alguna que otra mancha, mejor no las cojas, pues eso indica que son ya un poco viejas. En su lugar, escoge aquellas con la piel prieta, que no debe ser demasiado gruesa ya que esto podría significar que por dentro esté mas seca de lo que debería.
- También es recomendable fijarse en el cáliz, la parte que unía el fruto con el árbol. Lo mejor es que esté verde y con hojas, pues esto es garantía de que la naranja ha sido recolectada como mucho dos días antes, así que estará fresca.
- No todas tienen ombligo (la parte opuesta al cáliz), pero si lo tienen, es buena idea fijarse en él para elegir una naranja. Este ha de ser ancho y pronunciado, pues esto es señal de que su corazón estará jugoso y meloso.
- Una buena manera de descubrir si la naranja está amarga o no es olerla. Si desprenden un olor fuerte, casi con total seguridad estará dulce.
- No te recomendamos que cojas las bolsas ya cerradas por kilos, pues suelen contener algún que otro ejemplar que no está en perfectas condiciones.
- La única diferencia entre las naranjas de zumo y las naranjas para mesa es el tamaño o calibre. Las más pequeñas son mejores para hacer zumo puesto que que se aprovecha más en el exprimidor cada naranja. La variedad más apreciada para hacer zumo es la Navel una de las más típicas de Valencia, que se caracteriza por no tener pepitas y presentar un sabor mucho más dulce. También puede consumirse como naranja de mesa pues es una variedad muy carnosa.
- Las Valencia Late, las Navelinas o las Salustianas son otros ejemplares de calidad, también especialmente recomendados para elaborar zumo.