Crujientes por fuera y cremosos por dentro, los macarons son un dulce típico de la repostería francesa consistente en una galleta de merengue y almendra. La variedad de sabores que caracteriza a esta receta es infinita (limón, grosella, albahaca, frambuesa, chocolate, menta), tanto como su colorido.
Los macarons son unos dulces tan atractivos a la vista que incluso da pena comérselos. Delicados y elegantes, se asocian a la repostería francesa, pero lo cierto es que su origen no está muy claro. Los italianos y el País Vasco francés reclaman su paternidad, pero son los franceses los que han conseguido que todos asociemos esta receta a ellos. En cualquier caso, lo que sí sabemos es que su modo de prepararlos ha variado un poco con el paso de los años, pues cuando nacieron únicamente llevaban una concha en lugar de dos.
No queremos desanimarte, pero para ser sinceras tenemos que decirte que elaborar macarons no es lo más sencillo del mundo. La receta en sí no es especialmente complicada, pero cuesta cogerle el punto. Como en cualquier otra receta de repostería, lo más importante es seguir al dedillo las instrucciones y no ponerse a experimentar, porque entonces no van a salir bien. Es importante tener mucho mimo a la hora de hacerlos y también armarse de paciencia, además de contar con ingredientes de calidad. Quizá los primeros que hagas no van a ser los mejores del mundo y puede que alguno se te rompa, pero es cuestión de cogerle el truquillo.
¿Quieres aprender a hacer macarons de frambuesa como una experta? Vamos allá.
Ingredientes (para 24 macarons)
- 125 g de almendras en polvo
- 4 claras de huevo
- 250 g de azúcar glas
- 0.5 g de extracto de fresa
- Colorante alimentario rosa (dos gotitas)
- 250 g de frambuesas
- Media cucharada de esencia de vainilla
- 140 g de azúcar
Cómo elaborar macarons de frambuesa paso a paso
Comenzaremos preparando las galletas. Primero hay que mezclar en un bol las almendras en polvo, el azúcar glas y 2 claras de huevo. Acto seguido añade a la mezcla el colorante y el extracto de fresa.
Monta las 2 claras restantes y añádelas con mucho cuidado. Una vez tengas hecha la mezcla, métela en la manga pastelera (mejor con boquilla redonda). Sobre papel de horno, haz 48 círculos de aproximadamente 3 cm de diámetro y mételos al horno durante 10 minutos a una temperatura de 180º grados.
Mientras se enfrían, puedes aprovechar para ir haciendo el relleno. Para ello pon en una olla las frambuesas, la esencia de vainilla y el azúcar y cocínalo todo hasta que la fruta se deshaga (más o menos tardará 30 minutos). Cuando esté listo, tritúralo todo con una batidora hasta lograr un puré de consistencia fina. Deja que se enfríe y mételo en la boquilla. Cubre la mitad de cada galleta con este relleno y después tápala con la otra ejerciendo un poco de presión para que la crema llegue a los bordes.
Y ya lo tienes. ¡Ahora a disfrutar de su delicioso sabor!
