Hoy en día, no concebimos la vida sin que los electrodomésticos nos la faciliten. Algunos son esenciales, mientras que otros aportan confort, además de ahorrarnos tiempo y dinero. Si los cuidas como merecen, se mantendrán casi como el primer día durante más tiempo, con lo que tu bolsillo y el medioambiente lo agradecerán.
Normalmente, buscamos pasos clave para una limpieza general, aunque no solemos fijarnos en los electrodomésticos. A menudo, damos por sentada la operatividad de los electrodomésticos hasta que alguno falla y nos toca repararlo o hacer un nuevo desembolso. Sabemos que estos aparatos no durarán eternamente, pero, cuando invertimos en uno de ellos, esperamos que funcione bien el máximo tiempo posible. Desde una cafetera hasta un frigorífico, son los electrodomésticos que puedes cuidar con estos trucos de limpieza.

Con un buen uso y un mantenimiento regular, podrás alargarles la vida útil y asegurarte de que funcionen con la máxima eficiencia energética, lo que hará que tus facturas de luz y agua no se disparen. Además, mantenerlos en el mejor estado posible no solo evita costosas reparaciones o reemplazos, también reduce el riesgo de problemas mayores, como cortocircuitos eléctricos o incendios
Los electrodomésticos grandes de la cocina
Para empezar, es básico que leas el manual de instrucciones de cada uno de tus electrodomésticos para saber cómo utilizarlos correctamente. Pero hay otros muchos consejos que puedes seguir, te los contamos en este dossier.
Trucos para la nevera

- Bobinas del condensador. Límpialas, al menos una vez al año (si tienes mascotas, cada seis meses). Desenchufa la nevera antes de empezar y usa un cepillo para bobinas o una aspiradora con un accesorio de cepillo suave para eliminar el polvo y otros residuos.
- Juntas de las puertas. Revísalas regularmente en busca de grietas o signos de desgaste. Una junta dañada dejará que el aire frío escape y la nevera tendrá que trabajar más. Límpialas con una solución suave de agua y jabón y sécalas bien después.
- Temperatura ideal. Mantén la nevera a una temperatura de alrededor de 3-5°C y el congelador a -18 °C. Configuraciones más frías de lo necesario no mejoran la conservación de los alimentos y aumentan el consumo de energía.
- Hielo. Vigila su formación excesiva en el congelador, porque reduce la eficiencia del aparato. Si tu nevera no tiene función de descongelación automática, hazlo manualmente siempre que el hielo acumulado supere los 6mm de espesor.
- Interior. Limpia con frecuencia el interior de la nevera con una solución de bicarbonato de sodio y vinagre diluido, para combatir los olores y evitar el crecimiento de bacterias.
Trucos para el lavavajillas

- Filtros y rociadores. Límpialos regularmente para evitar que los restos de comida o depósitos de cal los obstruyan, lo que afectaría a la eficacia del lavado y produciría olores desagradables.
- Detergente. Utilizar la cantidad adecuada asegura una limpieza más eficiente y protege la máquina. Las pastillas o cápsulas ya vienen con la cantidad dosificada, para que no gastes de más. No olvides mantener un correcto nivel de sal.
- Limpieza mensual. Realiza un ciclo de limpieza mensual con un limpiador específico para lavavajillas o una solución casera de vinagre para eliminar los depósitos de grasa y cal y mantener el interior del aparato limpio y fresco.
- Sellado. Comprueba que las juntas de la puerta estén limpias y en buen estado. Si la puerta no cierra correctamente, puede causar fugas y reducir la eficiencia del lavavajillas.
- Limpieza de bordes y esquinas. En estos rincones de la puerta se acumulan residuos que provocan malos olores.
- Humedad residual. Después de cada ciclo de lavado, abre puerta del lavavajillas para dejar salir el vapor y evitar la formación de moho y olores.
Trucos para limpiar el horno

- Limpieza. Mantén el horno limpio: los residuos de comida y la grasa acumulados pueden carbonizarse y afectar al sabor de tus platos. Si tu horno no tiene función de autolimpieza (úsala con moderación), utiliza productos específicos para hornos o una solución de bicarbonato y vinagre o limón para una opción más natural. Evita los productos abrasivos y las esponjas metálicas, que dañan el revestimiento.
- Puerta. Revisa el sello de la puerta del horno para asegurarte de que está intacto y limpio. También las bisagras y cierre. Evitarás que se pierda el calor y que el horno tenga que trabajar más.
- Papel de aluminio. No cubras el fondo del horno con papel albal para recoger posibles derrames, puede obstruir los ventiladores, además de interrumpir la distribución del calor.
Trucos para la limpieza de la vitrocerámica

- Limpieza. Es importante realizarla después de cada uso para evitar que los derrames se quemen y formen manchas difíciles de quitar. Usa un raspador especial para vitrocerámica para eliminar residuos quemados o pegados, siempre con cuidado de no rayar la superficie, y productos de limpieza específicos son no abrasivos y ayudan a mantener el brillo sin dañar la superficie.
- Sartenes y ollas. Utiliza las que coincidan con el tamaño de los quemadores para que la cocción sea eficiente y evitar el sobrecalentamiento de áreas no cubiertas.
- Deslizamiento. No arrastres ollas y sartenes sobre la vitrocerámica, podrían rayar la superficie.
- Impactos fuertes. Evita dejar caer objetos pesados sobre la vitrocerámica, aunque es resistente, un golpe fuerte con algo pesado podría dañar o incluso romper la superficie.
- Azúcar. Si derramas azúcar o un líquido con mucho azúcar, límpialo inmediatamente con cuidado, ya que, cuando se enfría y endurece, el azúcar
Trucos para cuidar la campana extractora

- Filtros. Límpialos con regularidad para evitar la acumulación de grasa, que afecta a la eficiencia de la campana y aumenta el riesgo de incendios. Si son filtros metálicos, puedes lavarlos a mano con agua caliente y detergente suave o en el lavavajillas. Si son de carbón, diseñados para absorber olores, reemplázalos cada 4-6 meses.
- Ventiladores y conductos. Revisa y limpia los ventiladores y los conductos de la campana anualmente para asegurar un flujo de aire óptimo.
Trucos para limpiar el microondas

- Limpieza. La limpieza después de cada uso es esencial para evitar la acumulación de residuos de comida y grasa, que pueden absorber energía y reducir la eficiencia del aparato. Utiliza un paño suave con agua y jabón o una mezcla de agua y vinagre. Para una limpieza más profunda, calienta un recipiente con agua y unas rodajas de limón o unas cucharadas de vinagre durante varios minutos. El vapor ayudará a aflojar cualquier residuo pegajoso y podrás retirarlo fácilmente.
- Puerta. Comprueba que cierra bien. También que el sellado no esté dañado o sucio, permitiría escapar la energía del microondas, algo ineficiente y potencialmente peligroso.
- No operar vacío. Nunca enciendas el microondas cuando esté vacío, esto puede dañar el magnetrón y otros componentes electrónicos.
- Metales. Evita metales y materiales no aptos que pueden causar chispas o incluso incendios dentro del aparato.
Otros electrodomésticos que puede limpiar con estos trucos
Además de los grandes de la cocina, también hay otros electrodomésticos que puedes limpiar con trucos y consejos.
Trucos para limpiar la lavadora

- Detergente. Utiliza la cantidad adecuada según las instrucciones del fabricante y la dureza del agua de tu área. No por usar más quedará tu ropa más limpia, al contrario, quedarán residuos tanto en la ropa como en la máquina.
- Capacidad de carga. Evita sobrecargar el tambor, eso hace trabajar más a la lavadora e incrementa el desgaste de sus componentes mecánicos, aparte de conseguir un lavado menos efectivo.
- Bolsillos. Revisa bien los bolsillos antes de introducir la ropa, siempre puede haber olvidado algún objeto que ponga en peligro a la máquina y el desagüe.
- Temperatura. Escoge el programa más adecuado al estado y tipo de ropa, no abuses por sistema de programas de temperatura elevada.
- Limpieza. Limpia regularmente el filtro para evitar obstrucciones causadas por pelusa, pelo y otros residuos. Para el tambor, utiliza un limpiador específico o una solución casera de vinagre y bicarbonato de sodio. No olvides limpiar las juntas y la goma, evitarás la acumulación de moho y olores desagradables, sobre todo en lavadoras de carga frontal.
- Mangueras. Revísalas todos los años en busca de signos de desgaste, como grietas o fugas, y reemplázalas cada 3-5 años como medida preventiva.
- Conexiones seguras. Asegúrate de que todas las conexiones sean seguras y no haya fugas en los puntos donde las mangueras se conectan a la lavadora y a las tomas de agua
Trucos para dejar impoluta la secadora

- Filtro. Límpialo después de cada ciclo de secado para mantener la eficiencia de la máquina y prevenir riesgos de incendio causados por la acumulación de pelusas.
- Ductos. Los ductos (por donde expulsa el aire caliente al finalizar el ciclo de secado), han de limpiarse, al menos, una vez al año. Revisa también que no haya obstrucciones por escombros o nidos de animales en la salida al exterior.
- Verificación de la ventilación. Comprueba regularmente que el aire fluya de manera adecuada en la salida de la secadora mientras está en funcionamiento.
- Capacidad de carga. No sobrecargues de ropa la secadora, esto aumenta los tiempos de secado y reduce la eficiencia.
- Tipos de tela. Para un secado más eficiente, separa las prendas pesadas de las ligeras: las más pesadas seguirían húmedas cuando las más ligeras ya estén secas, con lo que necesitarías más tiempo de uso.
Trucos para limpiar el aire acondicionado

- Filtros. Límpialos idealmente cada uno o dos meses durante la temporada de uso intenso. Los filtros sucios hacen que el sistema trabaje más duro, lo que aumenta el consumo de energía y reduce su vida útil.
- Unidad exterior. Asegúrate de que esté libre de obstrucciones (hojas, polvo y otros escombros).
- Fugas. Comprueba si hay fugas en los conductos de aire, lo que haría que el sistema trabaje innecesariamente más duro y aumente la factura de energía, y que los conductos estén bien aislados.
Otros electrodomésticos pequeños que puedes limpiar con estos trucos
Pero en la encimera y armarios, también encontramos diferentes electrodomésticos que necesitan menos mantenimiento. Aunque puedes ponerlos a punto con estos trucos:
Limpieza de la plancha de la ropa
- Limpieza. Con una solución específica para limpiar bases de planchas o una mezcla casera de bicarbonato de sodio y agua o vinagre podrás limpiar suavemente la base sin rayarla. Aplícala con un paño suave y luego elimina cualquier residuo con un paño húmedo.
- Agua. Usando agua destilada evitarás la acumulación de cal y minerales que obstruyan los orificios de vapor y reduzcan la eficiencia de la plancha. Después de cada uso, vacía el tanque de agua para evitar la acumulación de minerales y el crecimiento de moho o bacterias.
Limpieza de la batidora

- Limpieza. Si inmediatamente después de cada uso llenas el vaso con agua caliente, añades unas gotas de lavavajillas y enciendes la batidora unos segundos, te resultará más sencillo.
- Motor. No sobrecargues la batidora mezclando ingredientes demasiado duros o llenando el vaso más allá de la capacidad recomendada, desgastarás prematuramente el motor.
Trucos para limpiar la aspiradora

- Bolsas. Si tu aspiradora usa bolsas, cámbialas antes de que estén completamente llenas. Una bolsa demasiado llena reduce la eficacia de la aspiradora y fuerza el motor. Si es una aspiradora sin bolsa, vacía el contenedor de polvo después de cada uso y lávalo cada pocos meses.
- Filtros. Mantén los filtros limpios y reemplázalos según las recomendaciones del fabricante. Un filtro sucio impide el flujo de aire y reduce la capacidad de succión de la aspiradora.
Trucos para poner a punto la tostadora
- Limpieza. Vacía la bandeja de migas después de cada uso para prevenir la acumulación de migas que pueden potencialmente causar un incendio. Si en las paredes ha quedado algún residuo de pan, espera a que el aparato se enfríe y retíralo con un cepillo de cerdas suaves.
- Evitar objetos extraños. Nunca insertes objetos metálicos en la tostadora para retirar el pan atascado, ya que esto puede causar un cortocircuito o un incendio.
Trucos para mantener limpia la cafetera de cápsulas

- Descalcificación. La acumulación de cal es común en las cafeteras de cápsulas, especialmente si usas agua dura. Descalcifica tu cafetera cada 3-6 meses.
- Depósito de agua. Antes de poner a funcionar la máquina, revisa que haya agua en el depósito. Eso sí, nunca la dejes estancada varios días.
- Compatibilidad. Asegúrate de usar cápsulas compatibles con tu máquina. El uso de cápsulas no compatibles puede dañar la máquina.