En medio del silencio de una casa tranquila, durante los primeros compases del sueño nocturno, cuando todavía no has caído profundamente, mientras lees relajadamente o haces cualquier otra actividad poco ruidosa, de repente, parece que se va a caer algo encima tuyo por el techo de la vivienda. Suena como si hubieran vaciado una bolsa de canicas. Y, lógicamente, te sobresaltas, y acto seguido, te preguntas por qué habrá pasado eso.
Resulta que no tienes ratas en el techo de casa, ni tampoco ha ocurrido alguna cosa extraña entre los cimientos del edificio. Ni siquiera es el vecino de arriba haciendo cualquier cosa que haya podido provocar ese ruido tan peculiar. La respuesta está clara y no es para preocuparse.
En concreto, este ruido de canicas sobre el techo de una vivienda es lo que se denomina golpe de ariete o pulso de Zhukowski. Está descrito científicamente por el ingeniero ruso Nikolái Zhukovski, de ahí que reciba este nombre alternativo el fenómeno del golpe de ariete.
En qué consiste
El golpe de ariete se produce por un fluido elástico y un cierre de alguna válvula de manera repentina. Es justo esto lo que hacemos cuando cerramos algún grifo de agua en casa, o cuando cerramos las llaves de paso. Lo que ocurre en este instante es que las partículas del citado fluido elástico, en este caso del agua, son empujadas por las que vienen detrás, todavía en movimiento. Algo así como el coche que arrolla al de delante cuando frena en seco.
Este fenómeno pasa siempre que cerramos el grifo del agua en casa. Lo que ocurre es que se genera una sobrepresión que se mueve por la tubería a una velocidad tal que puede superar a la del sonido en el aire. La consecuencia es que el fluido se comprime y, por otro lado, la tubería se dilata. A continuación, el fluido se detiene y vuelve a expandirse al desaparecer el impulso que la comprimía. Esto hace, a su vez, que la tubería vuelva a su dimensión normal, generando el efecto contrario.

Explican los expertos, como nuestros compañeros de Muy Interesante, que el fluido puede pasar a gaseoso al reducirse, formando una burbuja, mientras que la tubería se contrae.
El efecto descrito, generado por el golpe de ariete, no tiene consecuencias mayores, pero genera ese ruido parecido al de las canicas que caen sobre el techo. Sí puede ocurrir en alguna ocasión que una tubería estalle por este fenómeno. También puede romperse la válvula por la presión, especialmente en casas desocupadas durante largos períodos de tiempo.
Como te puedes imaginar, que escuches el ruido similar al de las canicas por la noche no quiere decir que solo pase en este tramo horario. El golpe de ariete se da continuamente en las tuberías de cualquier vivienda, pero es cuando más silencio hay en la casa cuando mejor se aprecia el citado sonido.
Y así es como la física nos resuelve una duda cotidiana, algo que seguramente te hayas preguntado muchísimas veces en casa cuando ocurre.