El pan, ese alimento tan cotidiano y versátil, ha sido parte fundamental de la alimentación humana durante siglos. Sin embargo, en el mundo actual de la nutrición, a menudo se le coloca bajo un escrutinio minucioso, con debates sobre cuál es el pan "más saludable" o "mejor" para nuestra dieta. Es fundamental reconocer que, en su esencia, todos los panes tienen su lugar en una alimentación equilibrada y, en última instancia, la elección del pan adecuado dependerá de nuestros gustos y necesidades individuales.
De arroz
Es la alternativa perfecta para casos de celiaquía o intolerancia al gluten. Suelen ser panes con una miga más compacta, pero resultan sanos y sabrosos.

De avena
Este, como otras variantes, hacen que la dieta sea más rica siempre que se haya fabricado con masa madre y haya tenido las horas de fermentación adecuadas.

Blanco
Cuando está confeccionado con harina refinada se le retira la cáscara (salvado) donde se encuentra la mayor concentración de fibra y minerales. Solo recomendaría la ingesta de este tipo a deportistas, aclara Vallejo, ya que la fibra que tiene el pan integral puede ocasionarles molestias gastrointestinales.

Cloud Bread
Es la alternativa baja en carbohidratos que arrasa en Instagram. Está hecho con huevos y con un queso cremoso tipo cottage o mascarpone y no contiene harina (gluten). Desde el punto de vista culinario, es fácil de realizar y se puede customizar añadiéndole hierbas aromáticas para darle más sabor y es una excelente base de pizza, apta para celiacos, o para montar un sándwich.

De centeno
Como ocurre con la harina de avena. Resulta muy energético.

Cómo dar con el adecuado
No creo que debamos demonizarlo. Si eliges uno elaborado con buena materia prima y con mimo, resulta sano y nutritivo. Disfruta del pan de manera consciente, teniendo en cuenta nuestras preferencias, necesidades nutricionales y estilo de vida

De espelta
Es muy recomendable por sus propiedades nutricionales. Aporta proteínas (contiene 8 aminoácidos esenciales), minerales y vitaminas del grupo B y D y fibra. “En el paladar se manifiesta intenso, pero interesante”.

Trigo sarraceno o alforfón
Su harina es utilizada en otras culturas para hacer arepas (un pan circular). Agregado a cualquier producto panificable, retrasa su degradación y lo mantiene fresco.

Integral
Es la alternativa más recomendada por nutricionistas y expertos. “Resulta saciante y aporta más cantidad de nutrientes que el blanco, aunque el valor calórico sea el mismo, apunta Vallejo. ¿Cuando tomarlo? “El mejor momento es el desayuno, pero dependiendo del estilo de vida se podría ingerir una pequeña porción a media mañana o en la merienda”.
