La doctora Shae Datta, prestigiosa neuróloga y codirectora del del Centro Langone de Conmoción Cerebral de la Universidad de Nueva York, tiene claro qué alimento evita a toda costa en los desayunos. A decir verdad, recomienda no tomarlo en ninguna de las comidas del día, pero se detiene en la primera de la jornada porque es cuando más se suele utilizar, untado en las tostadas.
En una artículo de la edición norteamericana de Yahoo, prestigiosos neurólogos confiesan cuál es el alimento que nunca comen. Participa, entre otros científicos, la citada especialista en neurología, que pone el foco en la margarina, un producto que se utiliza mucho como sustituto de la mantequilla en la cocina. Fuera de España, se usa mucho para cocinar, pero en nuestro país es un alimento que se ve encima de la mesa sobre todo en los desayunos porque se unta en las tostadas, de la misma manera que comemos la mantequilla.
La margarina es el producto que nunca tomaría la neuróloga estadounidense por su alto contenido en grasas trans. Lo desaconseja por encima de la mantequilla, que tiene más ingredientes naturales que la margarina, producto que ha ido creciendo por su naturaleza vegetal, lo cual hace que sea apto en dietas restrictivas con los productos de origen animal, y por la falsa creencia de que es más saludable que la mantequilla.
Lo primero, que es apto para vegetarianos y veganos, es innegable, pero lo segundo, que la margarina sea sana, lo niega cualquier especialista en nutrición. Incluso lo hace el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA): "Las margarinas 100% vegetales se obtienen a partir de grasas con un elevado porcentaje de ácido linoleico (un ácido graso esencial para nuestro organismo), una parte del cual debe ser saturado con hidrógeno para que el alimento sea más estable, lo que hace que se originen 'grasas hidrogenadas' y 'de configuración trans', que en nuestro organismo se comportan como grasas saturadas", informa.

El motivo por el que no es saludable la margarina
La doctora Datta desaconseja la margarina, alimento que jamás consume, tampoco en los desayunos como alternativa a la mantequilla, porque las grasas trans no solo son malas para el corazón, sino que también afectan a la parte del cuerpo que es objeto de interés de su especialidad. “A menudo escuchamos que las grasas trans no son buenas para el corazón y los vasos sanguíneos. Lo mismo se aplica a los vasos del cerebro”, explica.
La doctora pone como ejemplo este estudio publicado en la revista Neurology para argumentar y reforzar su decisión de desaconsejar la ingesta de la margarina por su influencia negativa en los vasos del cerebro. ”Encontró que los adultos mayores que tenían los niveles más altos de ácido elaídico (un tipo común de grasa trans) en la sangre tenían más probabilidades de desarrollar demencia”, explica. No olvides, en este sentido, que las grasas trans están íntimamente relacionadas con cuestiones de primer orden en materia sanitaria con el colesterol.
Por ello, en opinión de la doctora, “es mejor limitarse al aceite de oliva y a la mantequilla de verdad”. A esto podemos añadir cualquier opinión de experto en alimentación para ir un paso más allá con la seguridad de no equivocarnos y recomendarte el aceite de oliva virgen extra por encima de la mantequilla como grasa saludable que es la primera. Si te haces tostadas, el aove (el tomate, por supuesto, también) es tu mejor compañero de viaje.