Hay veces que las noticias no lo son porque tengan un componente novedoso. Puede ser, como en este caso, que lo sean por la confirmación desde una fuente fiable y respetada como la universidad de Harvard de algo que ya la ciencia venía apuntando desde hace tiempo: qué alimentos son mejores para envejecer mejor. En este caso, es un estudio centrado en las mejores dietas para las mujeres mayores de 50 años.
Las transformaciones hormonales propias de las mujeres que tienen una edad cercana a los 50 años son una realidad muy bien descrita por la ciencia. La menopausia implica una serie de cambios que tienen impacto a nivel emocional y físico, impacto cuya intensidad varía en función de las circunstancias personales, inabordables en una pieza que pretende generalizar como esta, y de los hábitos que mantengamos. Y en este punto sí se puede generalizar.
Lo hacemos a través de un nuevo estudio de un equipo de investigadores de la universidad de Harvard publicado a comienzos de este año en la prestigiosa revista American Journal of Clinical Nutrition. El estudio ha revelado, o confirmado más bien, qué tipo de alimentos deben ser los protagonistas en una dieta saludable de una mujer de 50 años o mayor si desea no solo envejecer más despacio, sino también de forma más saludable.

La proteína más saludable para la vejez
El estudio de Harvard ha sido liderado por el experto en nutrición, Andres V. Ardisson Korat, cuyo equipo ha puesto de manifiesto los beneficios que aporta la proteína vegetal a la salud y cómo contribuye, entre otras muchas cosas, a envejecer de forma más saludable.
Alimentos como la soja, los frutos secos o las legumbres, todos ellos muy ricos en proteínas vegetales, son los más indicados para las mujeres mayores de 50 años. Por supuesto, junto a verduras y frutas. Pero es la proteína vegetal, según el estudio de la universidad de Harvard, gracias a su contenido en micronutrientes y fibra dietética, la que tiene mayor capacidad no solo para retrasar el envejecimiento, sino para que este proceso sea lo más saludable posible, teniendo en cuenta que la alimentación no es, ni mucho menos, el único factor que tiene capacidad de actuación en el envejecimiento.

Lo que ha confirmado este nuevo estudio de la universidad de Harvard es que en comparación con las proteínas de origen animal, el consumo de proteínas vegetales es muchísimo más beneficioso para la salud. Por múltiples motivos, también por su citado impacto en el envejecimiento, ya que ayuda a reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas y a mejorar nuestra salud mental.
Es la proteína vegetal, por lo tanto, y según los expertos de Harvard, un aliado para limitar los efectos que la menopausia tiene en la vida de las mujeres, que suelen atravesar esta experiencia entre los 46 y los 50 años de media. Las lentejas, las nueces, los garbanzos, las almendras, la soja o el tofu son algunos de los alimentos vegetales ricos en proteína vegetal, ideales para incluirlos a menudo en la dieta a cualquier edad, pero más si cabe en este tramo de la vida en el caso de las mujeres.