Tanto si eres una amante del pescado como si no, este plato te encantará. Y es que esta receta es una opción perfecta para aquellos a los que les cueste incluir el pescado en su dieta, ya que proporciona la sensación de que estás comiendo espaguetis originales en lugar de pescado como tal. Digamos que va inmerso en una salsa que combina a la perfección. También se convierte en una alternativa muy valida para los niños que rehúyen de el pescado.

Ingredientes
- 300 g de espaguetis frescos
- 150 g de ventresca de atún en aceite
- 2 berenjenas medianas (o calabacines)
- 20 g de aceitunas negras
- orégano seco
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- Para la salsa de tomate
- 1 y 1/2 kg de tomates muy maduros
- 1 cebolla pequeña
- 2 dientes de ajo • aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta molida.
Preparación
Primero prepara la salsa:
- calentar un poco de aceite en una cazuela y freír los dientes de ajo enteros y la cebolla cortada en trocitos. Cuando esté transparente la cebolla, añadir los tomates pelados y troceados.
- Dejar que se hagan lentamente, destapados, hasta que hayan perdido casi toda el agua.
- Sazonar con un poco de sal, pimienta y un poco de azúcar. Pasarlo por el pasapuré para eliminar la piel y las semillas.
- Volver a echar en la cazuela y rectificar de sal. Si la salsa está muy líquida, reducirla a fuego lento.
- Lavar las berenjenas y partirlas en cuadraditos pequeños, pelándolas antes si se desea.
- Espolvorear con sal y dejar que escurran bien durante una hora en un colador.
- Enjuagarlas bien y freírlas en abundante aceite de oliva. Retirar con la espumadera y desgrasar en papel absorbente.
- Cocer la pasta en abundante agua con sal y escurrirla. Mezclarla con la salsa de tomate, un poco de orégano seco y las berenjenas. Emplatar y añadir las aceitunas y la ventresca de atún, bien escurrida de aceite, también por encima.