Los domingos pueden ser el final melancólico del fin de semana o el prólogo sereno de una semana en equilibrio. Todo depende de cómo los vivas. Y si alguien sabe de crear rutinas que calmen, inspiren y ordenen más allá de lo físico, esa es Marie Kondo. La experta japonesa del orden no solo enseña a doblar camisetas como un arte zen, también promueve hábitos que nos reconectan con lo esencial: el espacio, el tiempo y lo que de verdad importa. Su método va más allá de lo visual. Es una forma de cuidar la mente y el cuerpo a través de pequeñas acciones cotidianas. La clave es crear rituales conscientes, sencillos, que no se sientan como tareas sino como pausas que nos devuelven claridad. Y qué mejor día para eso que el domingo, cuando el ritmo baja y el hogar se convierte en el centro.
Estos “Domingos KonMari” no implican maratones de limpieza ni reformas extremas. Son momentos íntimos de conexión con tu casa, tus cosas y tu bienestar. Una forma de dejar espacio a lo que viene, empezando desde dentro. Ya te contamos el ritual de limpieza de primavera de Marie Kondo con las cuatro reglas que usa la experta en orden para renovar su hogar. Y, a continuación, repasamos esos pequeños hábitos que, inspirados por Marie Kondo, puedes incorporar a tus domingos para arrancar la semana más ligera, centrada y en paz.
Un armario ordenado, esencial para Marie Kondo
Dedicar unos minutos a revisar el armario el domingo por la tarde puede parecer algo menor, pero tiene un efecto inmediato en la claridad mental. Marie Kondo siempre dice que al ordenar la ropa, también se ordenan las ideas.
Dobla con cuidado lo que usaste durante la semana, airea prendas, devuelve cada cosa a su sitio. Y si tienes tiempo, planifica los looks de lunes a miércoles. Ganarás tiempo por las mañanas y evitarás decisiones innecesarias cuando estás con prisa.
Un baño que te abrace
Tu espacio de autocuidado también necesita orden para que realmente funcione como un refugio. El domingo, elimina lo que esté medio vacío o caducado, agrupa productos por uso (mañana/noche) y deja a la vista solo lo esencial.
Colocar tus productos de skincare por orden de aplicación, encender una vela o limpiar el espejo puede transformar el baño en un pequeño santuario donde terminar el día y empezar la semana con calma.
Una cocina con intención
Marie Kondo recomienda ordenar la cocina por categorías: despensa, utensilios, menaje. Pero los domingos, basta con algo más simbólico. Puede ser preparar un menú semanal sencillo o dejar lavadas las frutas para la semana.
El orden aquí no es solo estético: es práctico y te ahorra decisiones entre semana. Además, puedes preparar una comida casera tranquila y disfrutarla como ritual de cierre del fin de semana. Cocinar algo sencillo pero bonito también da paz.
El poder de una lista y un rincón de calma
Tener claridad sobre lo que viene ayuda a liberar ansiedad. Escribir una lista breve de cosas importantes para la semana (pero realista) es una forma de descargar la mente.
Hazlo desde un rincón ordenado que asocies con paz: puede ser una mesa con una planta, tu cama recién tendida o el sofá con una manta doblada. Es tu espacio de reset mental.
Cierra el día con gratitud, al estilo Marie Kondo
Marie Kondo insiste en agradecer a los objetos su función. Puedes llevar esa idea a un cierre emocional de domingo. Agradece en voz baja o por escrito algo bueno del fin de semana. Revisa qué vas a dejar ir y guarda lo que te hizo bien.
Ya te contamos cómo implementar el método KonMari de Marie Kondo en tu rutina de limpieza semanal. Y, en este caso, el orden no es solo guardar cosas en cajas. También es decidir qué pensamientos, emociones y rutinas te acompañarán el lunes. Lo demás, suéltalo.
