El queso es uno de los alimentos más adictivos y deliciosos que existen. Si tú también adoras este manjar, tenemos buenas noticias: un estudio ha demostrado que su consumo alarga la vida y previene ciertas enfermedades. Estas propiedades son gracias a la espermidina, una molécula presente en este alimento de manera natural.
Un estudio de la Universidad de Texas A&M descubrió que esta molécula aumentaba la esperanza de vida de los ratones de laboratorio en un 25%. Según uno de los autores del estudio, Leyuan Liu, "eso significaría que en lugar de vivir unos 81 años de edad, el estadounidense promedio podría vivir por encima de los 100 años”.
Esta investigación no se limitó a los roedores. Posteriormente, los investigadores realizaron una encuesta a 800 personas y descubrieron que aquellos que consumen queso con regularidad tienen menos probabilidades de sufrir enfermedades del corazón. Además, el riesgo de desarrollar insuficiencia cardíaca es un 40% menos que el de las personas que no consumen este alimento.
A la espermidina se le atribuyen otros importantes beneficios, como la prevención del cáncer de hígado y la fibrosis hepática. Sin embargo, los investigadores reconocen que todavía son necesarios más estudios para determinar su eficacia en este sentido.
Pero, ¿qué es exactamente la espermidina? Se trata de un compuesto de poliaminas que está detrás del proceso de autofagia celular, esencial para el correcto funcionamiento de estas. La espermidina ayuda al organismo a deshacerse de las moléculas invasoras. Si falla, las moléculas tóxicas podrían aumentar sus niveles en el cuerpo, dando lugar a enfermedades como el alzhéimer, el párkinson, la diabetes tipo 2 o incluso el cáncer.
¿Dónde está presente la espermidina?
Por suerte, la dieta mediterránea es bastante rica en alimentos con espermidina. Esta sustancia se encuentra sobre todo en el queso curado. Si no eres amante del queso, te alegrará saber que existen otros alimentos que también contienen dicha sustancia. Aunque en menores cantidades, está presente en los champiñones, las manzanas, la coliflor, las patatas y los guisantes, entre otros. Se halló en primer lugar en el esperma de los seres humanos (de ahí su nombre) y posteriormente en algunas bacterias intestinales.
Si consumes este tipo de alimentos con cierta regularidad, no solo estarás aumentando tu esperanza de vida, sino también la de tu bebé (en el caso de que estés embarazada). Este estudio descubrió que la espermidina abunda más en la leche materna, siendo más baja su presencia en las fórmulas para bebé. Sus beneficios no acaban ahí, pues ya en 2009 investigadores de la Universidad de Lieja (Bélgica) hallaron una relación entre la carencia de alergias alimentarias con el consumo de alimentos ricos en espermidina.
Además, ¿sabías que el queso es bueno para tus dientes y ayuda a dormir? Y no, no aumenta el colesterol, es un mito. Te contamos aquí todas las virtudes del queso. Eso sí, ten en cuenta que el queso tiene bastante grasa y calorías, así que consúmelo con moderación y dentro de una dieta equilibrada.