Si tienes antojos, estos son los nutrientes que te pueden estar faltando según una nutricionista
¿Quién no ha tenido alguna vez antojo de comer algo? Lo de tener antojos no es solo cosa de embarazadas o cuando estamos en los días de regla. Los antojos los tenemos la mayoría de personas. Pero pueden ser una señal del déficit de algunos nutrientes.

Seguramente, más de uno se identifique con la siguiente situación: estás viendo la tele tranquilamente y de repente, tienes ganas de comer chocolate. Es un hambre que ha aparecido de repente. Y solo puedes pensar en ese alimento en concreto. No acepta otro que no sea el que se te ha antojado.
Muchas veces tratamos de evitar estos antojos y optamos por comer otros alimentos alternativos que sean más saludables. Pero la realidad es que, la mayoría de veces, esa otra alternativa no nos satisface igual y el antojo sigue estando presente.

Por eso, antes de rehuir de ellos y hacer como si no existieran, podríamos pararnos un minuto a pensar que, tal vez, estos antojos están ahí porque nos quieren decir algo.
Hay varios estudios que respaldan que, los antojos a alimentos específicos vienen de la necesidad de satisfacer una carencia nutricional. Es decir, si nos está faltando algún nutriente en nuestro organismo, el cuerpo nos lo acaba pidiendo de una forma u otra.
La teoría es que aquellas personas que tienen ingestas más bajas de ciertos nutrientes, tienen muchas más probabilidades de tener la necesidad y el deseo de comer ciertos alimentos específicos.
Antojo de chocolate
Cuando tenemos antojo de chocolate, puede que nuestro cuerpo esté a falta de magnesio, porque el chocolate contiene este nutriente. Otros alimentos que contienen magnesio son: nueces, almendras y semillas (girasol, de lino, calabaza…).
Antojo de pan y otros hidratos de carbono como la pasta
Quizás no estés incluyendo la suficiente energía y glucosa al organismo y te lo esté pidiendo a través de hidratos de carbono simples. Otros alimentos por los que puedes optar ricos en hidratos de carbono son: pasta integral, quinoa, cuscús…
Antojo de alimentos fritos y grasos
Cuando se nos antojan alimentos fritos como las croquetas, las patatas fritas, empanadas… puede ser síntoma de que nos falta calcio y grasas saludables. Los alimentos que nos pueden satisfacer estos antojos serían: el aguacate, los frutos secos, el queso, el pescado azul como el salmón…
Antojo de alimentos salados
Si tenemos hambre de galletitas saladas, encurtidos, patatas de bolsa… el cuerpo puede estar pidiéndote más sodio y/o potasio. El pescado y el queso, por ejemplo, son alimentos ricos en sodio. Y el pescado azul como las sardinas, hortalizas y plátano, son ricos en potasio.

En definitiva, puede que haya una correlación entre los antojos que tenemos y los nutrientes que nos faltan. Pero no solo podemos delimitarlo a eso, ya que existen otras causas por las que aparecen estos antojos, entre las que se encuentran:
- Restricciones mentales: cuando tenemos una lista de alimentos “prohibidos” o “no permitidos”, lo único que conseguimos es aumentar aún más el deseo por comer dichos alimentos.
- Estado anímico: hay alimentos que tienen la capacidad de activar las vías de recompensa del cerebro y actuar como recompensa. Por eso, cuando estamos tristes, por ejemplo, tenemos antojos específicos.
- Estrés crónico: el estrés forma parte de nuestro día a día, pero cuando mantenemos unos niveles elevados de forma constante, podemos experimentar más antojos.
- Contexto: aunque no tengamos hambre como tal, muchas veces el cerebro asocia a comer un alimento en concreto con un contexto. Por ejemplo: comer palomitas viendo una peli.
- Tipo de alimentación: cuando llevamos una alimentación variada y equilibrada y cubrimos todas las necesidades, es más improbable que tengamos antojos (o al menos, no todo el rato). También es importante aportar la suficiente fibra y proteína para mantenerse saciados.
Además de estos, hay otros muchos factores más. Reducir los antojos es complicado si no sabemos de dónde vienen, por eso es interesante analizar para qué están ahí y en qué momentos son cuando más nos apetecen.