La dieta influye directamente en el tránsito intestinal , y por ello, conocer cuáles son los alimentos que producen estreñimiento es básico para acabar con este problema tan recurrente.
El estreñimiento afecta hasta a un 20 % de los españoles y es más frecuente en mujeres que en hombres, según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD). En ellas, los cambios hormonales como los que se producen cada mes con la menstruación y durante el embarazo lo favorecen, pero la alimentación e incluso si llevamos una vida sedentaria o estamos estresadas tienen que mucho que ver con la dificultad para ir al baño.
El primer consejo que se da para combatir el estreñimiento es tomar más fibra. La idea es no tener que recurrir a pastillas sino llevar una dieta equilibrada y rica en fibra. Para ello deberemos incorporar en nuestra alimentación alimentos integrales, frutas, legumbres y verduras. El consumo de estos alimentos deberá ir acompañado de una buena cantidad de agua (litro y medio o incluso dos litros), precisamente para que la fibra no se apelmace en el organismo pues esta se convierte en una especie de gelatina en nuestro interior. Gelatina que absorbe el agua que le llega, forma la masa fecal y estimula la defecación. Ojo con la fibra, tampoco hay que pasarse, deberemos tomarla en su justa medida, ni quedarnos cortas ni saturar el organismo.
El sedentarismo es otro de los factores que favorecen el estreñimiento. Un mínimo de ejercicio es básico para poner en marcha el organismo y que la “masa” que tanto te molesta, baje a donde debe. El estrés tampoco ayuda a la regularidad, los nervios y la ansiedad solo hacen más que empeorar el problema. Quizá ha llegado el momento de probar técnicas de mindfulness para relajarte.
Volviendo a la alimentación, los ultraprocesados, es decir, esos “alimentos” ricos en grasas y azúcares son, además de perjudiciales para la salud en general, negativos en caso de estreñimiento. Tampoco es muy recomendable pasarse con los lácteos.
A continuación, te contamos qué 8 alimentos pueden estar produciéndote estreñimiento para que los consumas con moderación o directamente los elimines de tu dieta (comida rápida, por ejemplo).
Un último apunte, tirar de laxantes sin supervisión médica puede ser una pésima idea. Además de poder empeorar el problema pueden causar dependencia. Mucho cuidado con automedicarte.
Arroz blanco
Hay una razón por la que el arroz blanco forma parte de las dietas blandas o astringentes en caso de diarreas. El arroz blanco ha sido procesado y despojado de la cascarilla, el salvado y el germen, que es donde se encuentra la fibra y los nutrientes, pero mantiene el almidón, que ingerido en altas cantidades, puede afectar las funciones digestivas, ralentizándolas. Para luchar contra el estreñimiento, mucho mejor el arroz integral.
Plátanos
Un estudio de la Universidad Konkuk (Corea del Norte) llegó a la conclusión de que los plátanos –sobre todo los verdes y al igual que el arroz blanco- contienen mucho almidón, por lo que pueden causar o agravar el estreñimiento. Para consumirlos, se debe esperar a que hayan madurado.
Lácteos
Los lácteos pueden producir estreñimiento en personas sensibles o intolerantes a la lactosa, ya que este azúcar, cuando no puede ser absorbido por el organismo permanece en el intestino. Además de estreñimiento, los lácteos también pueden provocar calambres, cólicos abdominales, diarrea o hinchazón.
Helados
Dentro de los lácteos, conviene prestar especial atención a los helados. Estos suelen contener mucho azúcar añadido -más que la leche o el queso, por ejemplo- y poca fibra, una combinación poco beneficiosa para tu intestino. Además, si contienen lactosa el riesgo es mucho mayor…
Pan blanco
Al igual que ocurre con el arroz, el pan blanco ha sido desprovisto de toda la fibra beneficiosa para el organismo, por lo que su consumo puede causar digestiones más pesadas y estreñimiento. En general, cualquier alimento que incluya harinas refinadas blancas es poco recomendable.
Carnes rojas
Las digestiones de carnes rojas (ternera, cordero, buey…) son pesadas y largas, por lo que aunque no son causa directa de estreñimiento, pueden alterar tu tránsito intestinal y hacerte padecer los síntomas asociados a él. No abuses de ellas y acompáñalas siempre con fuentes de fibra (como las verduras).
Café
Para algunas personas el café puede actuar como laxante, pero para muchas otras puede producir el efecto contrario. Y es que en casos de estreñimiento, tomar demasiado café sólo agrava los síntomas, ya que produce deshidratación. Lo mismo sucede con el alcohol.
Comida rápida
Hablamos de hamburguesas, fritos, pizzas, chuches… y otros alimentos que contienen muchas grasas y poca fibra. Seguir una dieta con esta combinación de nutrientes tan poco recomendable puede aumentar el riesgo de sufrir estreñimiento crónico.