¿Cuánto deporte hay que hacer para quemar los caprichos de comida rápida más comunes?
¿Sabes cuánto ejercicio tienes que hacer para quemar una hamburguesa? ¿Y una pizza? ¡Te lo contamos!
Hamburguesas y sándwiches, perritos calientes, nuggets de pollo, refrescos azucarados, porciones de pizza, pasteles y barritas de chocolate… es innegable que la comida rápida- o mejor llamada comida basura- nos suele gustar a todos en mayor o menor medida, aunque también somos conscientes de que son opciones que de forma frecuente, no son saludables. De hecho, la fast food es precisamente lo opuesto a la comida sana, ya que los productos que forman parte de esta familia de alimentos contienen altas cantidades de grasas saturadas e hidrogenadas, colesterol y sobre todo, calorías de bajo aporte nutricional.
Por ejemplo, ¿sabías que una sola hamburguesa grande con queso de un restaurante de comida rápida aporta unas 600 calorías y unos 24 gramos de grasa, debido a sus ingredientes? ¿O que un par de porciones de pizza margarita pueden aportarnos hasta 500 calorías? ¿Y que una inocente bolsa de patatas fritas ya contiene otras 300 calorías? ¿Y que un cubo de nuggets de pollo fritos supera las 400?
La mayoría de las personas no son verdaderamente conscientes de cuánto aporte energético de mala calidad ingieren cuando disfrutan de un plato de comida rápida, aunque seguramente muchas de ellas después se pregunten qué pueden hacer para quemarlas y así “compensar” de alguna forma ese capricho insano del que han disfrutado previamente.
¿Cuánto tiempo hay que correr en la cinta para quemar esa hamburguesa con queso que te pediste para cenar? ¿Y cuánta bici tienes que hacer para quemar esa bolsa mediana de patatas fritas que picoteaste por la tarde? ¿Y ese muffin de chocolate del desayuno? Si te has querido dar un "capricho" a base de comida rápida, no significa que estés haciendo nada mal, ni necesariamente tienes que compensarlo si es algo que se incluye de forma puntual en tu alimentación.
Pero, si a modo de curiosidad quieres conocer qué tendrías que realizar en tu rutina del gimnasio para equilibrar ese aporte calórico, te decimos cuánto ejercicio tendrás que realizar para lograr tu objetivo.
Por ejemplo, para un hot dog necesitaríamos realizar aproximadamente unas 2 horas y media de deporte, para una empanadilla rellena de carne y queso sobre 1 hora y 50 minutos. Y para unas patatas fritas tamaño mediano, unas 2 horas y cuarto.
Pero repito de nuevo, este tipo de conductas de compensación para nada son necesarias ya que lo único que provocamos son "restricciones" y desarrollar una mala relación con la comida. Comer de "sano" no va a hacer que te dejen de gustar este tipo de alimentos considerados como "no saludables", simplemente que hay que aprender a reducir su frecuencia de consumo.