La cuajada (Mamia, en euskera) es un postre mágico. Mágico, ya que, en cuestión de minutos, la leche con la que se elabora, normalmente, de oveja, cambia su estado de liquida, a sólida, gracias al cuajo. Pero aún hay más: Los aromas se vinculan fácilmente y como veréis en la receta, el resultado no es la suma de las partes, es mucho más. ¡Un postre sencillo y delicioso!
Acabado:
Disponer unas gotas de cuajo en el cuenco o bowl donde queramos hacer la Mamia (Cuajada).
Verter sobre los cuencos la leche tibia y dejar cuajar. Tardara un par de minutos en convertirse en una cuajada.
Disponer los frutos rojos por encima, al gusto.
Nota: No es necesaria la miel o cualquier otro edulcorante. Los frutos rojos e incluso la leche infusionada hacen que no echemos de menos el dulzor añadido*.
* Para golosas y golosos, os recomiendo un sustituto a la miel. En tiendas especializadas y en cualquier tienda de alimentación ecológica, podéis encontrar concentrado de manzana. Es un líquido obtenido a partir de zumo concentrado de manzana, con textura de miel liquida. ¡Está muy bueno!
Ficha
Tiempo de preparación min
Tiempo de preparación 15min
Tiempo de cocción 10min
Porciones 4
Tipo de receta (n/a)
Ingredientes
- 500 ml de leche fresca de oveja
- 1 lima
- 1 limón
- c/s de jengibre
- c/s de frutos rojos (arándanos, ciruela roja, cerezas… al gusto)
- c/s de cuajo liquido
Preparación
Lavar el limón y la lima bajo el grifo de agua fría
Pelar con ayuda de una puntilla o pelador, de manera que saquemos la mínima cantidad de albedo (parte blanca y amarga de la piel)
Utilizaremos las pieles de los cítricos para aromatizar la leche
Pelar una raíz de jengibre y laminar
Utilizaremos un par de láminas de jengibre para esta cantidad de leche
Poner la leche en un cazo junto con las pieles de cítricos y el jengibre
Hervir y una vez hervido, dejar un minuto fuera del fuego y colar
Dejar enfriar hasta los 50ºC aproximadamente