Blanco níveo por fuera y un interior extracremoso capaz de hacerte salivar. No, esto no es una adivinanza, estamos describiendo al huevo poché perfecto. Correctamente elaborado (te adelantamos que es muy fácil) debería quedar tal y como te contamos y será la 'guinda' perfecta para platos tanto casual como más elaborados.
Lo que caracteriza al huevo poché es que se hace en agua ligeramente hirviendo a la que se recomienda añadir un chorrito de vinagre (para que la yema y la clara no se separen). Quedará mejor cuanto más frescos sean los huevos. Respecto a tips para que el cocinado sea más fácil existen muchos: puedes hacerlo ayudándote de papel film, puedes hacerlo en el microondas...
Elijas el método que elijas, los huevos poché presentan unas características nutricionales que los hacen especialmente interesantes. Además de ser muy versátiles y encajar en todas las comidas (desde desayunos a cenas), la yema mantiene sus propiedades al mantenerse líquida. Además y al ser cocinado sin apenas aceite, su carga calórica es poco elevada y se trata de un método de cocinado muy saludable. ¡Genial si lo que buscas es aligerar tus recetas!
Y no, no hablamos de la típica tosta con aguacate y huevo poché, sino de platos originales y sorprendentes para cualquier ocasión. Te damos ideas de recetas con huevos poché.
Cuscús con verduras y huevo poché
El truco principal de esta receta está en picar muy bien las verduras y dejar que se pochen bien con un poco de aceite de oliva. Para elaborar el cuscús puedes hacerlo con agua o caldo de verduras (te quedará más sabroso si optas por esta segunda opción), pero el verdadero toque final lo aportará el huevo poché. Ten pan a mano, porque lo vas a necesitar.
Escabeche de verduras y setas con huevo poché
Esta receta, además de poderla recrear con tus verduras escabechadas favoritas (zanahoria, puerro, algún que otro ajito), admitirá los rovellons (o níscalos de toda la vida) perfectamente. Hazlos, a poder ser, en una olla de cocción lenta y remata con el huevo escalfado.
Gofre salado con huevo poché y guacamole
Para las amantes del brunch, esta opción de waffle salado puede ser ideal. La combinación dulce-salado que se consigue gracias al gofre, el guacamole (muchísimo mejor si es casero) y el huevo resultará original y jugosa. También puedes añadir otros ingredientes a mayores, como rodajas de tomate u hojas de lechuga.
Huevos turcos con yogur
El yogur puede convertirse en uno de nuestros ingredientes 'recetiles' clave con platos como este. Para recrear esta receta necesitarás yogur tipo griego (sin azúcar, desnatado, etc), pimienta negra, pimentón dulce (o picante), sal, aceite de oliva, tus hierbas favoritas, cebollino, ajo y huevos grandes. ¡Pruébalos y nos cuentas!
Coliflor con huevo poché
Oye, que nos encantan los platos sencillos y saludables. Cocina la coliflor al vapor y una vez hecha agrega unos ajitos laminados y un poco de pimentón. Para que el plato no peque de seco, corónalo con un huevo escalfado... ¡Y a disfrutar!
Pasta con calabaza
Si andabas a la caza de una receta original, esta es la tuya. Para preparar este plato necesitarás calabaza (asada previamente, claro). Tritúrala con sal, jengibre, pimienta molida, leche de coco y queso al gusto (en este caso, lleva parmesano y gorgonzola). Remata con un huevo poché y prepárate a querer repetir.