No todos los tipos de sales son iguales, y sus diferencias se encuentran en el gusto, la densidad, textura, contenido de sodio, mineral y de yodo. La sal está disponible para nosotros en múltiples formas: la sal de mesa yodada, sal marina, sal celta y la que hoy nos ocupa, la sal kosher. Ésta, con unas propiedades y características propias, es más benéfica para nuestra salud.
1. Minerales esenciales
El sodio y el cloruro son esenciales para nuestro cuerpo, en especial para la conducción del impulso nervioso y la función cerebral. La sal, por sí misma, no causa enfermedades del corazón. Se une al agua en nuestro torrente sanguíneo, aumentando la presión arterial. Por lo tanto, si se evitan alimentos poco saludables procesados que contienen exceso de sodio, la sal no hace daño.
2. Menos sodio
La sal Kosher es más baja en sodio en comparación con la sal de mesa. Mientras que la sal de mesa tiene 2.300 miligramos en 1 cucharadita, de sal kosher solo contiene 1.800 miligramos. Un adulto puede tener un máximo de 2.300 miligramos de sodio al día.
3. Menos procesado
Sal kosher procede de las minas de sal de la tierra. La variedad no se procesa tanto como la sal de mesa. Para todos los efectos, todas las variedades de sal son similares en estructura química. Sin embargo, la sal kosher no dispone de los aditivos artificiales.
4. Fácil de usar
La sal kosher permite cocinar fácilmente pues no se desliza a través de los dedos. Su estructura cristalina y textura gruesa hacen que se pueda sin sobre el fuego. Sal kosher también pesa menos en comparación con la sal de mesa.
5. Sabor más profundo
La sal kosher da más gusto en menores cantidades en virtud de su naturaleza menos procesada. Se puede reducir a la mitad la cantidad de sal en las recetas al cambiar a kosher, con el consiguiente beneficio para la presión arterial.
6. Se disuelve mejor
Se disuelve mejor en los alimentos, adhiriéndose a ellos fácilmente.
7. Pero no en la carne cruda
Los cristales de esta sal no se disuelven rápidamente, en especial en la carne cruda, haciendo que las escamas se adhieran a la superficie. La sal extrae eficazmente la sangre de la carne, por lo que es `kosher` para fines religiosos.
8. Decapado sal
La sal natural, como la sal kosher, se considera mejor que la sal procesada con fines de decapado. Los cristales de sal no se disuelven tan fácilmente como la sal de mesa en la solución de decapado, lo que hace de la sal kosher una mejor opción.
9. Fácil de encontrar y barato
La sal kosher no es difícil de encontrar y bastante más barata que la sal común.