12 virtudes de los espárragos

Según la forma de cultivarlos, hay dos clases de espárragos: blancos o verdes. Ambos tienen muchos beneficios. ¿Quieres conocerlos?
Beneficios del espárrago verde

Junto a la alcachofa es la verdura depurativa por excelencia y por familia se sitúa al lado de cebollas y puerros (pertenece a la Liliáceas), pero tiene alguna particularidad, sobre todo en lo relacionado con el sabor, suele ser exquisito y, a veces, es ligeramente amargo y con matices terrosos. A la vista suelen ser tallos de forma alargada que en la punta forman una especie de escamas y se suelen clasificar por su calibre. Es decir por el grosor (delgado, medio grueso y extragrueso). Si los compras frescos, su mejor temporada es en primavera y en conserva los encuentras durante todo el año. En el momento de la compra selecciona ejemplares con las puntas cerradas y compactas, de tallo sin imperfecciones. ¿A la vista? No deben mostrar decoloraciones ni varios tonos de verde.

Para conservarlos, envuelve el manojo en un paño húmedo y ponlos en el cajón de la fruta de la nevera. ¿Prefieres congelarlos? Necesitan un ligero escaldado previo. ¿El proceso? Retira la parte leñosa con la mano (basta con apretar en el extremo y retirar la parte que cede a la presión). Después, ponlos en agua hirviendo durante un par de minutos y refresca en agua con hielo para activar su color verde y disponlos en un recipiente o en bolsas aptas para la congelación.

En cuanto a la forma de prepararlos, evita las cocciones térmicas prolongadas. Para que conserven todo sus nutrientes, es mejor que queden al dente (crujientes) y que siempre los refresques en agua helada para que conserven toda su clorofila y un color verde muy vivo. ¿Quieres ideas? Puedes preparar unos espárragos verdes con salsa mimosa o un original tartar de espárragos blancos.

¿Los prefieres blancos o verdes?

Los primeros crecen bajo tierra, sin sol, por lo que no tienen clorofila (pigmento), por eso tienen menos vitaminas, sobre todo ácido fólico y vitamina C, y también tienen menos asparagina, un aminoácido esencial.

¿Frescos o en conserva?  Estos últimos tienen menos minerales y más sodio (especialmente por la sal añadida al líquido de la conservación y cobertura), con lo cual podría ser un dato interesante a tener en cuenta.

¡Descubre las virtudes de los espárragos!

Ayudan a mantenernos saciados

Los espárragos están compuestos principalmente por agua, y su contenido en grasas y glúcidos (azúcares) es bajo. Además, contienen muchísima fibra, lo que hace que nos mantengamos saciados durante más tiempo.

Cuidan los hematíes

Gracias a su aporte de ácido fólico, relacionado directamente con los glóbulos rojos  y con la correcta formación del feto durante el embarazo.

Aportan sales minerales

Son ricos en potasio, que evita los calambres. Por su parte, también tienen hierro, fósforo y yodo que contribuyen al correcto funcionamiento del sistema muscular.

Podría reducir los niveles de acrilamida

Se está estudiando si la asparagina, la sustancia que cuida la corteza cerebral, podría actuar contra la acrilamida (sustancia química que se crea de forma natural en ciertos alimentos que contienen almidón durante procesos de cocción o durante su procesamiento industrial).

Refuerzan la corteza cerebral

Los espárragos son ricos en asparagina. Se trata de un aminoácido que es responsable de conferir un ‘aroma’ especial a la orina y que ‘alimenta’ el córtex cerebral. Es decir, favorece la transmisión de información entre neuronas y podrían prevenir procesos neurodegenerativos.

Desintoxican el organismo

Como el aguacate y las coles de Bruselas, estas yemas comestibles son ricas en glutatión, un compuesto antioxidante que descompone agentes cancerígenos y otras sustancias tóxicas. Además, regulan las funciones del sistema inmunológico.

Protegen la salud

El espárrago contiene minerales y vitaminas que participan en procesos orgánicos. Aporta ácido fólico (favorece la formación de glóbulos rojos), betacaroteno, un antioxidante bueno para la vista,  vitamina C y algunas del grupo B, que favorecen la función del sistema nervioso.

Tienen acción diurética

Aumentan la excreción urinaria, favoreciendo la eliminación de líquidos. Esto es debido a que son ricos en potasio y pobres en sodio. El primer mineral  tiene efecto vasodilatador, mantiene la función muscular y regula los niveles de agua.

Aceleran la digestión

No solo aligeran el proceso digestivo, también regulan el tránsito intestinal y evita el estreñimiento.

Cuidan las neuronas

Aportan vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B6), que contribuyen a una buena función del sistema nervioso.

Mantienen la visión y la piel

Aportan un pigmento antioxidante, betacaroteno, que interviene en la buena calidad de la vista y mejor aspecto de la piel

Evitan el estreñimiento

Aunque no son de las verduras más ricas en fibra si la contienen en abundancia, por eso ayudan a regular el tránsito intestinal, lo que muchas veces ayuda también a adelgazar pues hay personas que por problemas de estreñimiento acumulan residuos, nada favorables para la correcta metabolización de las grasas.

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