Seguro que lo has escuchado muchas veces, en una dieta equilibrada deben primar productos como vegetales frescos, legumbres o fruta de temporada y escasear todo lo posible los productos ultraprocesados. Pero, ¿qué pasa con los ultraprocesados veganos? ¿Por el hecho de ser veganos son saludables?
Los alimentos de origen vegetal destacan, entre otras cosas, por tener un elevado nivel de fibra, proteína de calidad y más saludable que la de algunos alimentos de origen animal, como la carne, por no ir acompañada de grasas saturadas. Pero no solo de verduras se alimentan los veganos, también existen ultraprocesados veganos que buscan imitar productos como hamburguesas, salchichas o albóndigas pero en versión vegana. En muchos casos, para conseguir esos productos se usan aditivos y otros ingredientes que ayudan a mejorar sus propiedades para que se parezca a su homólogo animal. Pero, aunque estos aditivos hacen que el producto esté más “sabroso” lo convierten en opciones muy poco saludables.
En muchas ocasiones, las prisas son las que nos hacen decantarnos por este tipo de productos, pero cualquier ultraprocesado que compremos puede cocinarse en casa con los ingredientes necesarios y un poco de paciencia. Sin embargo, no siempre disponemos del tiempo suficiente.
En esos casos, ¿cómo elegir entre un procesado vegano saludable y otro perjudicial? En el caso de los procesados de todo tipo, debemos valorar el etiquetado nutricional de todos estos productos ya que muchos contienen aditivos y otros ingredientes que naturalmente no están presentes en los alimentos de origen vegetal, tales como grasas de mala calidad, azúcares simples, sal o almidones incorporados con el fin de que nos parezcan más apetitosos, tanto por su sabor, su olor y su textura (aunque sean poco recomendables para una dieta equilibrada).
Si sigues una dieta vegana y necesitas saber qué productos deberías eliminar o restringir al máximo de tu día a día, aquí tienes una lista de productos que entrarían dentro de la categoría de "ultraprocesados veganos no saludables".
Por supuesto, esto no quiere decir que sean alimentos prohibidos, puedes tomarlos de vez en cuando a modo de capricho, pero recuerda que deben ser la excepción y no la regla en tu menú diario.
Helado
La alternativa vegana al helado tradicional está realizada a base de derivados de la soja, la avena u otros ingredientes. Pero, cuidado: los porcentajes de azúcar y edulcorantes que contienen supera a los de un helado tradicional. Vegano o no vegano, sigue siendo un helado.

Hamburguesas
Las hamburguesas veganas son una de las peores opciones ya que se fabrican con otros alimentos vegetales ultraprocesados. Es decir, mezclando industrialmente otros componentes a los que, para mantenerlos y brindarles sabor, es necesario añadir aditivos, harinas refinadas, conservantes. Puedes hacerla en casa de forma sencilla y con ingredientes asequibles como legumbres y vegetales.

Salchichas
Al igual que las hamburguesas, las salchichas veganas están fabricadas con multitud de ingredientes poco saludables, además del montón de saborizantes. Al final, solo estarás consumiendo un producto del todo artificial, sino también con una calidad nutricional sumamente escasa.

Chips vegetales
El contenido graso medio de los chips vegetales es del 30 %, que no dista demasiado del de las patatas fritas, situado en el 31,8 %. En ambos casos, la grasa proviene del aceite en el que se han preparado los snacks. Además, también tienen muchos azúcares.

Batidos
Si están hechos con helado, leches saborizadas, cremas de frutos secos no caseras y demás ingredientes poco saludables, el batido tampoco lo será. Mejor prepararlo en casa, con leches vegetales sin azúcar añadidos y frutas de temporada y tener en cuenta que, aun así, nunca va a ser una alternativa sana y nutritiva.

Gominolas veganas
Las gominolas tradicionales están fabricadas con cartílagos de origen animal, normalmente de vaca y cerdo, por eso están también prohibidas para los veganos. La alternativa vegana suele usar gelificantes como el "agar agar", pero siguen teniendo mucha azúcar y ningún nutriente.

"Leches" vegetales con sabores
Casi todos los veganos recurren a las bebidas vegetales creadas a partir de soja o de otros cereales… pero el problema viene cuando las marcas les añaden sabores -como la vainilla o el coco- para hacerlas más atractivas y ricas. El azúcar se multiplica. Si vas a sustituir la leche de vaca por una de estas bebidas, asegúrate de encontrar una que no esté petada de azúcar.

Comida rápida
Los ingredientes aportan calorías y cero nutrientes, ya sean o no veganos. Y aunque la fibra y las proteínas pueden ser más altas en las comidas vegetarianas (gracias a las legumbres, verduras y granos integrales), también pueden serlo las grasas saturadas y el sodio.

Galletas veganas
Métetelo en la cabeza, ninguna galleta es saludable. Ni las veganas. Si tienes mucho antojo, mejor hacerlas tú mismo en casa con plátanos, avena, mantequilla de cacahuete, almendras y pasas o chips de chocolate.

Cubitos de caldo vegetal
Casi todas las pastillas de caldo vegetal llevan glutamato, por lo que no son especialmente saludables. También suele incluir grasas saturadas y grandes cantidades de sodio. Mejor evítalas, aunque sean vegetales.

Barritas de cereales
La mayor parte de las barritas poseen azúcares y grasas en altas proporciones, no son destacables en fibra y proteínas y por ello, no sacian con facilidad.
