La tortilla o los boquerones son algunos de los platos más pedidos en bares y restaurantes españoles. Pero la realidad es que hasta en los bares más famosos, como el restaurante Casa Dani y su tortilla, han sufrido brotes de toxiinfecciones alimentarias, desde salmonelosis, enfermedad del anisakis o la histamina. Y es que es muy importante tener un gran conocimiento de la seguridad alimentaria en tu cocina para evitar posibles enfermedades.
Las profesoras colaboradoras del master universitario de Alimentación saludable y sostenible, Cristina Bedmar Carretero y Pilar Orús Pérez, nos advierten de los distintos peligros que hay en una mala praxis a la hora de cocinar y conservar los alimentos. Nos enseñan a cómo evitar estas enfermedades con 10 consejos de conservación y seguridad alimentaria.

¿Cuáles son los riesgos de no tener una seguridad alimentaria?
No es necesario que en la casa conviva con nosotros una persona alérgica a ciertos alimentos para mantener una higiene óptima. De hecho, la falta de higiene es el mayor riesgo a la hora de manipular utensilios que puede llevarnos a una contaminación cruzada entre alimentos crudos y cocinados. Y es que alimentos como el pollo, si no se hace una manipulación pulcra de él puede contaminar otros alimentos que consumamos en crudo. Esta carne de ave si se consume en crudo o sin hacer del todo puede transmitirnos enfermedades como la salmonella.
Las enfermedades y toxiinfecciones alimentarias son generadas por las bacterias, hongos, toxinas o virus que conviven con los alimentos crudos y que la falta de higiene y de cuidado en el manipulado provoca enfermedades como "la listeriosis, la salmonelosis, la enfermedad diarreica por Campylobacter, la intoxicación por toxina estafilocócica, la enfermedad diarreica por cepas de Escherichia coli, el botulismo, la enfermedad por anisakis, la intoxicación por histamina o la hepatitis A", aseguran las expertas.
10 consejos para evitar una intoxicación alimentaria
Las expertas en seguridad alimentaria nos traen una lista con 10 prácticas para manipular los alimentos y evitar a toda costa que enfermemos a causa de la comida.
1. Seguir las cuatro normas básicas de la seguridad alimentaria: limpiar, separar, cocer y enfriar. En primer lugar debes limpiar todas las superficies de trabajo antes de empezar. Además es muy importante lavar la fruta y la verdura sin ningún producto comercial. Otro consejo muy importante es no lavar las carnes, independientemente del tipo que sean, para evitar una contaminación.
2. Lavarse la manos muy bien es imprescindible en la cocina. Esto se repite si estornudamos, vamos al baño, manipulamos alimentos crudos o tocamos superficies sin desinfectar. El Ministerio de Sanidad recalca que es "muy importante que debemos friccionar las manos como mínimo 15 segundos" y las propias expertas recomiendan incluso "estar 20 segundos".
3. Limpiar con frecuencia los utensilios y equipos de cocina. Los trapos de tela, junto con demás utensilios como tablas de cortar, cucharones o sartenes pueden esparcir los microorganismo y contaminar alimentos. Incidir en su limpieza después de manipular alimentos como la carne, el pescado, los huevos o el pollo, entre otros, cuando están crudos.
4. Utiliza agua y materias primas seguras, ya que las profesoras advierten que estos elementos "pueden contener microorganismo y contaminantes químicos". Para eliminar peligros se deben tomar medidas de prevención como limpiarlos y pelarlos.

5. Los alimentos deben estar en su temperatura óptima. El refrigerador y el congelador son nuestro mayor aliado. Los alimentos se tienen que meter en la nevera cuanto antes. Una vez hechos, no pueden pasar más de dos horas para que vuelvan a estar en la nevera.
6. Consumir los alimentos de la nevera en un plazo máximo de dos a cuatro días. Las expertas advierten que si quieres conservarlos más días, "se deben congelar". Esta acción es muy segura, aunque algunas comidas se pueden ver afectadas en la textura, como ocurre con la patata.
7. Separa los alimentos crudos de los cocinados. Esta es un consejo clave que las profesoras recalcan. Además no se deben usar las mismas herramientas al manipular los dos tipos de alimentos. "Si usamos el mismo utensilio con alimentos crudos y reutilizarlo sin lavar con alimentos ya cocinados evita la contaminación cruzada", aseguran.

8. No descongelar alimentos a temperatura ambiente. Hay que tomar este consejo muy en serio en carnes y pescados, ya que una vez se inicia el proceso de descongelación, pueden volver a crecer microorganismos en el alimento. A la hora de descongelar, o lo haces con temperatura controlada en nevera o en el microondas ante de cocinarlos.
9.Todos los alimentos deben cocinarse a una temperatura mayor de 63ºC. El pollo, los huevos y el pescado son los alimentos con más riesgo. Si vas a comer alimentos crudos, es recomendable congelarlo 24 horas antes.

10. Los huevos se usan si tienen la cáscara limpia e íntegra. Algo muy importante es que no puedes lavar los huevos antes de usarlos, según la Agencia Catalana de Seguridad Alimentaria, "lavarlos puede facilitar que se contamine el alimento que preparemos u otros alimentos presentes en la cocina". Otro consejo es evitar romper la cáscara en el mismo sitio donde lo viertas.