Si no te gusta cómo quedan los estores y las cortinas te molestan pero no soportas la luz directa del sol, hay una solución para no dejar el ventanal de turno expuesto todo el verano. Está a la venta en tiendas multiproducto de internet como Amazon, en tiendas especializadas y también en comercios físicos como Leroy Merlin.
En realidad, la alternativa a las cortinas de la que te vamos a hablar en esta pieza no es una novedad. Hace tiempo que los avances tecnológicos irrumpieron también en el ámbito de las soluciones para el hogar y, ojo, edificios de empresas y edificios públicos como colegios. Y en lo que respecta al sol, en España tenemos que ir un poco por delante con respecto al resto de Europa por motivos obvios: nos cocemos durante los meses de calor.
No es casualidad que tengamos persianas y otros muchos países pasen de ellas, tampoco que los toldos y soluciones alternativas como pérgolas, sombrillas y parasoles se vendan como churros en primavera. Y es raro encontrar una casa sin cortinas ni estores, dos soluciones clásicas para filtrar la luz del sol que penetra por las ventanas y puertas de las terrazas y balcones.
Algunas hay, pero casi siempre por una cuestión estética: no a todo el mundo le gustan las cortinas o los estores. Y hay también a quien le molestan directamente. Y eso que Ikea tiene unas cortinas coloridas y traslúcidas que es difícil que no le gusten a alguien. Pero como hay gustos para todos los colores, es interesante conocer otro tipo de soluciones contra el sol que no impliquen tener que renunciar a la claridad que este nos aporta, que es lo que hace la persiana de toda la vida.
Una solución de 20 euros
La solución alternativa ideal es el llamado adhesivo vitrostático, una especie de vinilo diseñado específicamente para hacer de escudo contra la luz directa del sol en ventanas pero sin impedir que la claridad pase al interior de las estancias que quieres proteger.
Esta solución se utiliza mucho, como decíamos antes, en colegios, hospitales o edificios de empresas, que suelen contar con grandes ventanales que no se pueden tapar con cortinas o estores. Pero de este tipo de edificios ha dado el salto al ámbito del hogar, ya que es una solución magnífica también para ventanas más pequeñas.
Para colocarlo, como explican desde Leroy Merlin, una de las tiendas que vende este adhesivo vitrostático, solo necesitas cinta de carrocero, el vinilo, un rollo de papel absorbente y agua jabonosa sin alcohol. Aquí te explican el proceso en tres minutos, paso a paso, resolviendo todas las dudas.
El precio varía en función de la marca y la tienda donde lo compres, pero el de Leroy Merlin, para que tengas una referencia fiable, tiene una medida de 0,75 x 1,5 metros y cuesta 19,99 euros la unidad, que está fabricada en PVC, por lo que también es muy resistente. Además, es perfectamente lavable.
Puede gustarte más o menos, pero no hay duda alguna sobre la eficacia de esta solución, ya que ofrece un 99% de bloqueo contra los rayos UV, aportando además privacidad al interior pero sin bloquear la deseada claridad natural.
