Mejora tu autoestima, regula el sueño, reduce el riesgo cardiovascular, impulsa tu vida sexual...Estos son solo algunos de los beneficios que los expertos y la ciencia asocian a un peso saludable. Pero no son todos.
Aquí hemos recogido diez de los más destacados. Ahora bien, evitar el sobrepeso y la obesidad, de la mano de los consejos de un nutricionista, es la clave para cuidar de tu salud.
1. POTENCIA LA VITALIDAD

Según Rubén Bravo, nutricionista y portavoz del Instituto Europeo de la Obesidad, el peso ideal está relacionado con unos niveles de energía óptimos. O dicho de otro modo, el sobrepeso y la obesidad se asocian a estados de decaimiento y al sedentarismo.
MÁS LIGERA, MÁS VITAL. Cuando nos ponemos a dieta y, al cabo de unas semanas, vemos cómo perdemos los primeros kilos, solemos apreciar ese impulso vital. Poco a poco, somos más activas, desbordamos entusiasmo y energía.
SIGUE LAS RECOMENDACIONES. La vitalidad hace que tengamos más ganas de hacer cosas, de movernos, de dejar el sofá y salir a la calle, lo que se traduce en un fortalecimiento de la salud, además de contribuir a la pérdida de peso.
Una vida activa no significa que debas ir al gimnasio de lunes a domingo, basta con intentar cumplir los consejos de instituciones como la OMS, que recomienda de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos.
2. REFUERZA TUS ARTICULACIONES

No estar en nuestro peso tiene mucho que ver con el desgaste articular. Así lo considera el nutricionista Rubén Bravo. De modo que estamos ante una de las razones más interesantes para bajar de peso, especialmente, para las mujeres con edades que rondan los 50 años. Es en torno a esa edad cuando comienzan las molestias y dolores relacionados con los huesos y las articulaciones.
ALIVIO EN LAS RODILLAS. Una de las consecuencias más valiosas de perder peso es que, al hacerlo, se reduce la presión en las rodillas. En concreto, por cada kilo que elimines, acabarás con cuatro kilos de presión en esta delicada articulación. En consecuencia, poco a poco, comprobarás cómo disminuye el dolor en los casos inflamación, como la artritis.
EL DOLOR ARTICULAR DISMINUYE. Existen investigaciones que demuestran que la disminución significativa de peso provoca una mejoría de las alteraciones que hay en el cartílago y que el incremento de peso provoca el efecto contrario. Esto hace que, simplemente por el hecho de bajar de peso unos kilos, más allá de tomar medicación o no, haya una mejoría tanto en cuanto a dolor como de movilidad.
3. MEJORA EL SUEÑO

La calidad del sueño y, muy especialmente, disfrutar de un descanso reparador, es fundamental para contar con una buena salud.
Se ha observado que las personas obesas que han perdido un mínimo del 5 % de su peso corporal, después de 6 meses, duermen mejor y por más tiempo. Si a este dato le sumamos que los adultos que duermen menos de cinco horas muestran mayor tendencia al sobrepeso y la obesidad que aquellos que duermen en promedio 7 horas, cobra todavía más sentido el hecho de perder peso.
4. ESQUIVA LA DIABETES

Estar en nuestro peso ideal tiene muchos beneficios para la salud en general. Pero, hay uno especialmente relevante y es que “nos aleja de la diabetes tipo 2”, asegura el nutricionista Rubén Bravo. “Esta enfermedad-explica el experto– es una disfunción del páncreas, un problema metabólico que, a largo plazo, genera muchos problemas, como pérdida de vista, deterioro de los tejidos, envejecimiento prematuro”.
“La obesidad y la edad son dos factores directamente relacionados con la diabetes tipo 2, sobre todo, la obesidad. Si vas cumpliendo años, pero estás en tu peso, es muy probable que puedas mantener unos niveles correctos de glucosa en sangre. Incluso podrás tener el azúcar un poco alto, pero no sería necesario tomar medicación”, añade el experto.
Y SI YA ERES DIABÉTICA...Llevar una dieta adecuada y tener un peso saludable mejora los niveles de glucosa en la sangre de los pacientes diabéticos, lo que puede reducir la cantidad de medicación necesaria para el manejo de la enfermedad.
5. FRENA EL COLESTEROL

Según un estudio elaborado por la Sociedad Española de Cardiología (SEC), un elevado porcentaje de la población española, concretamente el 20 % de las personas de 18 años o más, presenta un nivel de colesterol superior a 250 mg/dl (un valor excesivo), lo cual favorece la aparición de enfermedades cardíacas.
DIETAS PARA PERDER PESO Y GANAR SALUD. Adelgazar es, en parte, el resultado de llevar una dieta baja en grasas saturadas y con una amplia base de alimentos vegetales.La cuestión es que este tipo de alimentación también es la más adecuada para controlar el temido colesterol.
Los expertos de la SEC recomiendan el consumo de cinco raciones al día de frutas y verduras, cereales integrales (pan, pasta, arroz), legumbres (tres raciones a la semana), pescado azul (atún, sardina, boquerón, salmón...), frutos secos (nueces, almendras) y aceite de oliva virgen.
6. ALEJA EL DETERIORO COGNITIVO

Una dieta sana, equilibrada y completa acompañada de ejercicio físico moderado y constante son los dos pilares básicos para perder peso de forma saludable.
Por si eso fuera poco, la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) asegura que esos buenos hábitos constituyen una protección frente al deterioro cognitivo que precede a la demencia.
APRENDE A TOCAR EL PIANO. La SEEN sugiere que, para frenar el sobrepeso incipiente y fomentar la agilidad mental, ayudaría mantener la mente activa. Para ello, recomienda la lectura, los juegos intelectuales, aprender a tocar un instrumento musical o estudiar un idioma.
7. DISMINUYE EL RIESGO CARDIOVASCULAR

Una de las razones más importantes para poner en marcha una dieta de control del peso, sin duda, es la que está relacionada con la salud cardiovascular.
Según el nutricionista Rubén Bravo, la obesidad y el sobrepeso están íntimamente relacionados con el aumento del riesgo de enfermedades del sistema circulatorio o del corazón, sobre todo, cuando la persona tiene grasa abdominal. En estos casos, “el problema se suele concretar en hipertensión, fallo cerebrocardiovascular o un elevado nivel de colesterol y triglicéridos”.
REDUCE LA SAL EN LA DIETA. Tanto si eres hipertensa como si no, es importante que tengas en cuenta la alimentación como un factor determinante para controlar tu tensión.
Según la Fundación Española del Corazón, la presión arterial se puede elevar sin una causa previa conocida, por algunas enfermedades (endocrinas, renales...) y por el consumo de algunos fármacos. Otras causas son el abuso de tabaco, el exceso de alcohol, el estrés, el sobrepeso, la falta de ejercicio... y también por seguir una dieta con exceso de sal.
8.IMPULSA LA VIDA SEXUAL

Las personas que llevan una vida integrada por hábitos saludables y que cuidan su peso “suelen tener una vida sexual más plena que aquellas que padecen sobrepeso u obesidad”, asegura Rubén Bravo, nutricionista y portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO).
“Los hombres tienen menos dificultades para la erección –continúa el experto– y las mujeres tienen más apetencia sexual”. Además, es impotante recordar que las parejas con un peso corporal adecuado “presentan menos problemas de fertilidad”. Según el Departamento de Salud y Recursos Humanos de Estados Unidos, muchos estudios han encontrado una relación entre la obesidad y la infertilidad en las mujeres.
9. AUMENTA LA AUTOESTIMA

En ocasiones, la confianza en una misma está algo tocada, pues, en la actualidad, no es fácil mantener a flote la seguridad. Perder unos kilos te puede ayudar a recuperar esa autoestima perdida.
“Cuando tenemos un cuerpo esbelto, dentro de un peso saludable, con unas proporciones armónicas, nuestra autoestima suele estar mucho más alta. La ropa nos queda mejor, nos apetece más cuidarnos... Al miramos al espejo, normalmente, nos gusta más lo que vemos que cuando tenemos sobrepeso”, considera Rubén Bravo, nutricionista y portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad.
10. REDUCE LA ANSIEDAD

Además de los numerosos efectos positivos que tiene para la salud física perder peso, está comprobado que existe una clara relación entre las frituras y la salud mental.
Así lo sugiere un trabajo de investigación llevado a cabo por un grupo de científicos cuyo resultado se publicó en la revista PNAS. Los autores concluyeron que el consumo habitual de fritos conlleva un 12 % más de riesgo de sufrir ansiedad y un 7 % de más posibilidades de padecer depresión.
REDUCE LAS FRITURAS. Dado que una dieta de adelgazamiento debería excluir o restringir el consumo de fritos, se presume que, cuando la llevas a cabo, además de dejar de consumir calorías extra, estarás cuidando de tu salud mental.