¿A quién no le gusta la pasta? Este delicioso plato italiano es increíblemente versátil, está siempre delicioso y se puede hacer más o menos elaborado. Lo que está claro es que siempre gusta. Si eres de las que se limita a llenar el carro con espaguetis y macarrones del supermercado, te estás perdiendo todo lo bueno. Y es que aunque la pasta industrial nos saca de un apuro y está muy rica si le ponemos una buena salsa, siempre será mejor si escogemos pasta fresca artesanal.
Si te apetece un plato de pasta en condiciones, tienes que ir a un obrador artesanal a comprarla fresca. La pasta fresca es aquellas que una vez elaborada no se somete a un proceso de secado final, por lo que está más húmeda (recuerda que por eso es importante mantenerla refrigerada). No aporta ningún beneficio nutricional sobre la pasta seca, pero está más sabrosa y tierna, y tarda menos en cocerse.
Puedes hacerla tú misma en casa si sigues estos sencillos trucos, pero si no quieres complicarte la vida, hay varios locales en Madrid que la venden al peso. A la hora de comprarla, la variedad que puedes encontrar es inmensa. La hay rellena con mezclas de sabores y originales (raviolis, tortelinis) o sin relleno (lasaña, espaguetis, tallarines). Cuando la compres lee bien la etiqueta y fíjate en la fecha de caducidad para que sea lo más fresca posible. Y un truco extra: elige la pasta fresca que tenga más huevo, pues sabor es más pronunciado.
Una vez que tienes la pasta, cuécela en abundante agua hirviendo con sal. El tiempo de cocción varía entre 1 minuto para las planas y 6 minutos para las rellenas. En cuanto al acompañamiento, no todos los tipos de pasta van bien con todas las salsas. Por ejemplo, la carbonara va muy bien con los rigatoni, mientras que la salsa putanesca marida a la perfección con los y fettucini.
Como buenas fans de la pasta italiana de verdad, hemos salido en busca de los obradores artesanales donde mejor la preparan, y estas son nuestras conclusiones. Ficha estos locales porque te van a encantar.
Il Pastaio
Fue uno de los primeros que empezó a vender pasta fresca artesanal en Madrid. Tienen todas las variedades de pasta que te puedas imaginar: corta, larga, rellena, gnocchis, lasaña... Destacan sobre todo las medias lunas de jamón y ricotta, los raviolinis de salmón y los rigatoni al huevo. Disponen de venta online y servicio a domicilio. Además de las dos tiendas, cuentan con su propio restaurante, ubicado en Ríos Rosas, 49.Dónde: Ríos Rosas, 39 y Santa Engracia, 36

Laboratorio de pastas
En este local ubicado en pleno barrio de Salamanca se elabora pasta fresca 100% al huevo todos los días. Venden varios tipos de pasta rellena, gnocchis de patata y espaguetis. De todas sus propuestas, destacan la pasta rellena de ricotta y espinacas y la de calabaza, pues son las más vendidas. También ofrecen la opción de comprar la pasta congelada para disfrutarla cuando más te guste, aunque recomiendan consumirla antes de cuatro meses.Dónde: Lagasca, 62 y Barquillo, 41

Pasta Fresca Madrid
La variedad de pastas que ofrecen aquí es inmensa. Ahora bien, los tagliatelle picantes y los raviolis rellenos de pollo al curry son dos de las pastas más famosas de este local madrileño. Si vas específicamente a por sus gnoccis, debes saber que solo los preparan el 29 de cada mes.Dónde: Glorieta de Quevedo, 7 y Calle Corazón de María, 74

Linda Pastissa
Si buscas pasta fresca artesanal de verdad, tienes que ir a Linda Pastissa. Detrás de este local se encuentra Sissa Verde, napolitana que se ha propuesto acercar la verdadera pasta italiana a Madrid. Los tortelloni rellenos de calabaza y los cappellacci rellenos de ricotta y mortadela son sus platos estrella.Dónde: Mercado de Vallehermoso, puesto 41

Pasta Mito
Cuentan con una amplia gama de pastas artesanas que se pueden probar allí o llevar para tomar en casa. Si no sabes qué pedir, su pasta rellena de gorgonzola y pera, la de salchichas, pepperoni y nabo son un éxito asegurado. También tienen platos preparados como deliciosas lasañas.Dónde: Bolivia, 9
