Los minerales son fundamentales para gozar de una buena salud. Los más importantes son el hierro, el calcio, el magnesio y el fósforo. Según los expertos, este último se trata del segundo mineral más abundante en el organismo y de hecho, interviene en un montón de procesos que en él tienen lugar, como la mineralización ósea o la producción de energía.
El fósforo es un macronutriente muy importante a la hora de mantener una correcta salud de los huesos, músculos y en general, todas las células de nuestro cuerpo. Sus bondades van mucho más allá, pues también se ha observado que dicho mineral ayuda a mantener correctos los niveles de calcio en el organismo, a mejorar el funcionamiento de los músculos y los nervios y a reducir el dolor tras el ejercicio.
Este mineral también juega un papel muy importante en la salud dental, pues protege las encías y previene las caries, además de ayudar a mejorar la digestión, pues disminuye sus síntomas y regula las hormonas.
Por lo general no solemos tener déficit de fósforo, más bien todo lo contrario. Según afirma un estudio publicado en la revista 'Nutrients', muchas personas presentan niveles excesivamente altos de este mineral en su organismo, lo que puede provocar diversos problemas de salud. Entre ellos, debilidad y dolor en los músculos y las articulaciones, picor en los ojos, náuseas, vómitos y diarrea.
El fósforo está presente en un montón de alimentos que consumimos en nuestro día a día como los lácteos y otros alimentos de origen animal, por lo que las posibilidades de sufrir déficit de este mineral son bastante reducidas. Sin embargo, siempre viene bien estar al tanto de cuáles son los alimentos que mayor cantidad de este poseen para moderarse y no correr riesgos que nos lleven a padecer problemas de salud. ¿Quieres descubrir cuáles son? Sigue leyendo.
Carnes
Ya sea de vacuno, pollo o cerdo, la carne es una gran fuente de proteínas de alto valor biológico. Si queremos garantizar a nuestro organismo un buen aporte de fósforo también son excelentes alternativas. Prioriza las carnes magras (pollo, pavo y conejo) sobre las carnes rojas, pues estas últimas aportan más grasas saturadas.

Chocolate
Además de estar delicioso, el chocolate negro tiene un montón de propiedades para el organismo. Aporta una gran sensación de saciedad, reduce el estrés y es antioxidante, entre otras. Por si fuera poco, contiene un elevado porcentaje de fósforo, pues ronda los 270 mg cada 100 g.

Huevos
Los huevos son uno de los alimentos más interesantes desde el punto de vista nutricional, pues aportan proteínas de alto valor biológico, además de minerales como el selenio, hierro, yodo, zinc y fósforo. En cuanto a este último, es importante destacar que concentra todo en la yema, donde podemos encontrar hasta casi 600 miligramos por cada 100 gramos.

Lentejas
Las lentejas son una legumbre muy apetecible para los meses de otoño e invierno, pues guisadas nos hacen entrar en calor en seguida. Desde el punto de vista nutricional también son muy interesantes, y es que además de proporcionarnos mucha energía gracias a sus hidratos de carbono, y grandes cantidades de fibra, también nos aportan mucho fósforo. Sin ir más lejos, 100 gramos de esta legumbre contienen 180 miligramos de dicho mineral, lo que supone un 14% de la cantidad diaria recomendada.

Pescado azul
La mayoría de los alimentos de origen animal son fuente de fósforo. Si hablamos de pescados, los que mayor cantidad de este mineral poseen son los azules como el salmón o las sardinas, que también destacan por su contenido en Omega 3. Cada 100 gramos de producto aporta entre 300 y 400 gramos de fósforo.

Pipas de girasol
Las pipas son otro de esos alimentos que nos aportan mucho fósforo, nada menos que 1100 mg por cada 100 g. Ten en cuenta que la cantidad diaria recomendada de fósforo para un adulto es de 700 mg, así que con 100 mg ya la estaríamos superando, lo cual no es muy recomendable pues una cantidad excesiva de fósforo en el organismo puede ocasionar problemas de salud en los riñones.

Lácteos
Los lácteos contienen altas cantidades de fósforo. En el caso de los quesos, a mayor curación, mayor cantidad de este mineral. Para que te hagas una idea de lo que aporta, en 100 gramos de producto hay entre 300 y 500 gramos de fósforo.

Quinoa
La quinoa es un superalimento con un montón de fibra, proteínas, magnesio, hierro, zinc y fósforo. Para que te hagas una idea, en lo que al fósforo respecta, 100 gramos de este producto contienen 152 miligramos de este mineral, un 12% de la cantidad diaria recomendada.
